Difíciles son los momentos de separación de una pareja, pero más complejo se vuelve cuando hay hijos de por medio. Y peor aún es cuando alguna de las dos partes no cede ante los derechos de los menores. Con frecuencia, podemos observar cómo existen casos donde las madres, por diferentes motivos, interfieren en la comunicación entre el niño y el padre. Vanesa Mestre, una abogada especialista, habló con el Diario 13 y contó qué debe hacer el padre en esta situación, cada cuánto se da y de qué se trata el procedimiento.

Según Mestre, 3 de cada 10 madres (registrados únicamente por denuncias) no cumplen con el derecho a la comunicación del padre e hijo, es decir la responsabilidad parental. “Esto se da por diferentes motivos. Pero muchas veces las denuncias son por causas personales entre la madre y el padre. Mientras que los únicos perjudicados son los niños”, explicó la especialista en leyes.

El procedimiento correcto y legal en estos casos es: al no haber llegado a un acuerdo entre los padres, se considera necesario una mediación judicial. Si no hay acuerdo, pasa directo a los juzgados. La abogada contó que es de vital importancia tener en cuenta que es un derecho del niño contar con la comunicación con el padre y que este sepa que hay mucho más por hacer que sólo una denuncia.

“Si ya está acordado judicialmente, lo favorece al padre, ya que legalmente está asentado que ambos deben hacerse cargo de los hijos en común”, contó.

Mientras que otro de los motivos por los cuales las mujeres toman esta decisión, es el tema cuota alimentaria. “Cuando los padres no cumplen con la cuota económica de los menores y las madres se hacen cargo del día a día de los gastos de los niños, suelen tomar la decisión equivocada: amenazar a los progenitores con que si no pagan, no podrán verlos”, dijo.

En ese momento, es importante saber algunos factores; cuando el padre no puede pagar una cuota alimentaria porque no posee del dinero y ya hay un procedimiento legal entre medio, existe la posibilidad de llegar a un acuerdo y que el/los menores vivan unos días con la madre y otros con el padre.

“El tema ahí es complejo, la represalia es esa: no dejarlos que los vean, a falta del dinero. Mientras que lo correcto es que, si no hay economía para los menores, se comparta la convivencia. Muchos padres comenzaron a pedir la custodia compartida por la mala situación económica. Mientras que, si el padre tiene una mejor posición en cuanto al dinero, de igual manera tendrá que seguir enviando plata por más que convivan con ambos progenitores”, finalizó.