Papá y mamá: la historia del panadero que cría solo a sus hijos
La lucha de un padre que cumple varios roles en su familia luego de un problemático divorcio que le dejó la custodia de sus cuatro hijos.
Ricardo Irrazabal no es un padre cualquiera. Él en muchas ocasiones asume un doble papel en su familia, ya que se reconoce como padre y madre. Las circunstancias de la vida lo llevaron a tener que pasar obstáculos, pero su objetivo de estar con sus cuatro hijos se pudo cumplir.
Irrazabal es un sarmientino que desde hace tres años los cría en soledad, luego de que la Justicia le diera la tutela. Este hombre, de 44 años y oriundo de Media Agua, lleva adelante muchos desafíos, pero el mayor de ellos es buscar el bienestar de su familia.
Si bien no es común que los papás se hagan cargo de los hijos por resolución judicial, hay casos en los que lo ameritan, siendo este uno de ellos. Sucede que luego de un complicado divorcio, Ricardo afrontó un largo proceso para recuperar la tenencia de tres de ellos, quienes son menores de edad.
Luego del dicho proceso, su mayor miedo fue la posibilidad de quitarle la cercanía con “los amores de su vida”. Por ello, es que luchó para darles bienestar y seguridad. En el momento en que vio que esto no era pleno, hizo todo para que estén a su lado, aun considerando lo que vendría en el futuro.
Fueron cuatro años los que estuvo con visitas reducidas para verlos, hasta que inició la causa que dictaminó la oficialización del divorcio y la custodia compartida con su expareja. Según sus declaraciones, la decisión final tuvo base en acciones de negligencia de su exmujer, quien en más de una ocasión dejó a los menores encerrados en su casa. En este sentido, lo que él pudo constatar es que ella iba a bailantas fuera de Sarmiento, cuando cada uno de ellos era menor de edad. En ese momento la más pequeña tenia tan solo 2 años.
Además, Ricardo detalló que gracias a la ayuda de asistentes sociales de Hospital Venturas Lloveras, lograron generar un seguimiento y encuestas vecinales. A partir de este trabajo, se demostró que la madre no podía continuar con la custodia de los menores. Por ello, la Jueza de Paz de Sarmiento le dio la patria potestad a Irrazabal.
Este panadero, quien también se desempeña como mecánico, mencionó que “la madre de mis hijos tiene días y hora de visita, pero no cumple lo acordado”. De sus cuatro hijos, tres de ellos viven con él. Esto se debe a que la mayor tiene 19 años y se fue del hogar, para vivir con su pareja. El resto hoy tienen 16, 8 y 6 años de edad.
La situación es difícil, por ello es que Ricardo aseveró que “ser padre y madre a la vez es muy duro”. Por este motivo, debe encargarse en soledad del aseo, comida, educación y salud de los niños. “La verdad en muy duro, pero tengo que sacar fuerzas de donde sea para sacar adelante la familia”, aclaró.
El mayor anhelo de Ricardo es poder compartir los mejores momentos con sus hijos y darles todo lo necesario para la que sean felices. “Quiero pasar cada minuto del día con ellos, pasarla bien y darle lo mejor”, dio a conocer.
En cuanto a sus sueños, acotó que desea “que sean alguien en la vida”. Además, detalló que quiere que conserven la humildad y el respeto por todas las personas, acciones que les enseña con el ejemplo.
Si bien llevar solo a su familia le resultó difícil, él precisó que no piensa darse por vencido “porque hay que seguir adelante, siempre por mis hijos”. “Ellos son los que me dan fuerza para levantarme cada día”, indicó.
Lo que dice el Código Civil de la tenencia de menores
Cabe considerar que el Código Civil y Comercial Argentino contempla explícitamente que en caso de que se otorgue el cuidado personal de los hijos a uno de los progenitores el otro tiene el derecho y el deber de mantener una fluida comunicación con el niño, y la regla es que debe elegirse al progenitor que facilite el derecho a mantener un trato regular con el otro. Todas las medidas buscan el bienestar, cumplimiento de derechos y oportunidades de los menores en cuestión.
Al mismo tiempo, es considerable destacar que en la mayoría de los casos la guarda de los menores está a cargo de la madre. Solo en casos extremos sucede lo contrario, como en el caso de Ricardo y sus hijos.