En las últimas semanas, la provincia de San Juan fue escenario de alarmantes hechos vinculados a las adicciones y sus consecuencias. Desde intentos de secuestro, fallecimientos por sobredosis hasta episodios de violencia en espacios públicos, los sucesos evidencian una problemática mucho más profunda y estructural. En este contexto, el psicólogo Raúl Ontiveros charló con Cien por Hora, donde advirtió sobre la gravedad de la situación y la necesidad de una intervención urgente.

"Estos hechos no son aislados", aseguró Ontiveros.  Además sumó: "Si uno los analiza en conjunto, son puntas de un iceberg que refleja lo que está sucediendo en nuestra sociedad. Tenemos una gran disponibilidad de drogas y una accesibilidad que comienza desde edades muy tempranas". El especialista señaló en este medio que, en los últimos años, se ha observado una expansión en el consumo de sustancias como la marihuana, la cocaína, y también de drogas de diseño, entre las que se incluyen metanfetaminas, popper y ketamina.
Ontiveros subrayó que el consumo de cocaína, históricamente asociado a franjas etarias de 25 a 35 años, ha desbordado esos límites. "Hoy tenemos chicos de 15 años consumiendo y también adultos de 55 o 60 años que se inician recientemente en esta droga. Esto nos habla de una irrupción masiva y transversal", dijo.

A esta situación se suma la preocupación por la adulteración de las sustancias. "La cocaína que se vende en San Juan, incluso la más cara, apenas contiene un 38% de cocaína real. El resto es basura: tafirol, harina, azúcar impalpable u otros polvos. Esto no solo aumenta los riesgos físicos, sino también los cuadros psicopatológicos como alucinaciones, delirio y depresión", explicó.

El psicólogo también destacó la conexión entre las adicciones, la salud mental y el suicidio. "La triada de adicciones, depresión y suicidio está cada vez más presente. Muchas personas atraviesan procesos de autodestrucción que impactan no solo en ellas, sino también en sus familias y seres queridos", reflexionó.

Para Ontiveros, uno de los grandes desafíos radica en la insuficiencia de recursos para abordar este problema. "En San Juan tenemos apenas 12 camas en el servicio de psiquiatría del hospital Marcial Quiroga y otras seis en el Rawson. Es insuficiente para una problemática de esta magnitud", lamentó.

El especialista también pone el foco en la Ley de Salud Mental, que según él presenta restricciones que dificultan la creación de nuevos centros de internación para personas con adicciones. "El artículo 27 prohíbe la apertura de nuevas internaciones. Esto es un pequeño, pero gran detalle que debe ser revisado urgentemente. La realidad ya está sobrepasando a la ley", afirma.

Ontiveros aludió sobre la necesidad de analizar la situación desde un punto de vista clínico y no ideológico. Por ello dijo: "La atención ambulatoria o los centros de día funcionan para ciertos casos, pero no para todos. Hay personas con cuadros duales, donde a la adicción se suma una patología psiquiátrica como la depresión o la psicosis. Estas personas necesitan una atención mucho más compleja".

Para finalizar llamó a la reflexión y a la acción inmediata. "Debemos preguntarnos si realmente estamos haciendo todo lo posible para ayudar a estas personas. La falta de recursos y la ausencia de prioridades claras en la agenda pública nos están dejando desamparados frente a esta crisis. Es hora de actuar, porque la realidad no espera".