Ricardo Olivera, la inspiración de una generación de periodistas sanjuaninos
Este martes a sus 70 años de edad el reconocido periodista falleció, pero habiendo dejado una marca en la comunicación de nuestra provincia.
Este 1 de febrero la comunicación de la provincia de San Juan sufrió una enorme pérdida. A manos del Covid 19, el reconocido y querido periodista Ricardo Olivera dejó este mundo. Debido a sus múltiples comorbilidades el recordado hombre falleció en cuestión de días. Sin embargo, nadie podrá borrar la marca que dejó en una generación de periodistas locales.
La relación de Ricardo con los medios de comunicación, sobre todo con la radio, comenzó en los 70'. Mientras se encontraba estudiando la carrera de Ingeniería centrada en Filosofía y Minas, el hombre llegó a Radio Nacional. Desde ese primer trabajo hasta sus últimos años de trabajo, Olivera fue pasando por una infinidad de lugares.
Fue columnista de Diario de Cuyo, trabajó en Radio Sarmiento, en Radio Colón y sobre todo fue artífice de la Radio Light. Él se convirtió en la cara visible del medio que fue creciendo en gran medida por su presencia. En esta emisora, Ricardo tuvo roce con grandes colegas a los que formó sin un gramo de egoísmo. Con un espíritu solidario, compartió su conocimiento por ejemplo con Gastón Sugo.
"Se fue un maestro. Fue una persona que me tomó, me formó y fue mi guía por muchísimos años. Ricardo estuvo en Light unos 25 años y de esos yo llevo 10 o 12 años. Para Light Ricardo fue el puntal, fue algo muy fuerte para esta radio hasta el 2016 que dejó el medio por razones lógicas. Ricardo fue una persona única", expresó este discípulo de Olivera a Diario 13.
Si bien el propio Sugo señala que Ricardo era una persona estricta en el ámbito laboral y que tenía un carácter fuerte, eso no quitaba su lado "profesor". A él le gustaba leer, estar informado, se diferenciaba de los demás por su voz tan característica y sobre todo por manejar muy buena información.
"Era bastante estricto pero tenía una mente brillante. Se fue el último periodista de la talla de él. Tenía una capacidad de lectura, de análisis, de incorporación de información. El tipo tenía una mente brillante, una memoria pródiga, él tipo te podía leer un libro y al otro día recitártelo con puntos y comas. Tenía una mente única, fue un gran maestro", manifestó.
Olivera tenía una mente repleta de contenido de diversos temas, una envidiable cultura general y una gran habilidad para comunicar todo tipo de noticias. Gracias a su manera tan rigurosa y metódica de trabajar, directa o indirectamente, se convirtió en una inspiración prácticamente para toda una generación de comunicadores que aprendieron escuchándolo.
"Fue un tipazo de una generosidad muy grande a la hora de poder formarte, de darte contenido, un gran profesional, un gran padre que vivió por su familia. No solamente se fue un gran periodista, que para mi era el mejor que había en San Juan, sino que un tipazo, un maestro y por momentos para mi un padre", sentenció Sugo.