Tras 21 años viviendo de prestado con 8 hijos, cumplió el sueño de la casa propia
Se trata de Alejandra, una sanjuanina que este lunes se convirtió en una de las adjudicatarias de las 69 viviendas que se entregaron en Ullum.
Este lunes 30 de noviembre quedará grabado para siempre en la memoria de Alejandra, una sanjuanina que después de 21 años de vivir en casas prestadas con sus 8 hijos se convirtió en una de las 69 adjudicatarias de las viviendas que entregaron desde el IPV en el departamento Ullum.
Si bien este lunes siempre será recordado por esta mujer, el pasado viernes 27 de noviembre será aún más imborrable. Esto se debe a que cuando estaba celebrando su cumpleaños número 42, recibió el llamado en el que le confirmaron que iba a recibir una de estas casas a estrenar.
"Yo ya había presentado toda la documentación y cuando llamé me dijeron que estaba aprobada, que tenía que esperar nada más. El viernes me llamaron y me dijeron que hoy me iban a hacer la entrega. Este es el mejor regalo posible, no puedo pedir nada más", relató la afortunada luego de fotografiarse con Sergio Uñac, Leopoldo Soler, intendente de Ullum, y Marcelo Yornet, director del IPV.
Esta gran noticia llegó luego de 21 años de estar anotada en el IPV, sin tener suerte de salir sorteada. A lo largo de estas más de dos décadas la sanjuanina tuvo a 8 hijos que debió mantener, sin poseer un inmueble en el que asentarse. A raíz de esta situación Alejandra y sus pequeños tuvieron que recurrir a vivir de prestado en la vivienda de algunos familiares.
"Estuve un tiempo en la casa de mi suegra, después en la casa de algunas tías, hasta que conseguí que me prestaran una casa en Ullum. Vivía en un asentamiento, yo pasaba por este lugar y decía 'que me toque, que me toque'", recordó la nueva adjudicataria. Por el hecho de vivir en casas que no eran de su propiedad, Alejandra tenía que atravesar momentos incómodos ya que no todos soportan a tantos niños juntos en una misma casa.
A raíz de ello, necesitaba si o si conseguir una vivienda propia para vivir con los más chicos tranquilamente y sin molestar a nadie. Afortunadamente ese día tan esperado llegó y no sólo se celebró en Ullum, sino que se festejó hasta el cielo. "Estoy re contenta y pensando en mi mamá que falleció esperando 30 años la casa y no le tocó, tuve yo la suerte. Ahora vamos a estar tranquilos", reflexionó la sanjuanina.