Dolor, bronca y angustia, son las sensaciones que manifestó sentir Gabriel Farías, hijo de desaparecidos y miembro de la agrupación H.I.J.O.S en San Juan, después de conocer que a Gustavo De Marchi, represor en la última dictadura militar, la Cámara Nacional de Casación, decidió otorgarle el beneficio de prisión domiciliaria.

Cabe recordar, que el genocida cumple una condena de 25 años por crímenes de lesa humanidad, además de fugarse junto al ex jefe de Inteligencia de San Juan, Jorge Olivera. Hoy De Marchi tiene 71 años, razón principal por la que recibió la prisión domiciliaria.

Farías expresó este jueves en Compacto 13, que la noticia les cayó ‘como un baldazo de agua fría’. El militante contó que no lo esperaban, sobre todo por el antecedente de fuga de De Marchi. “No revisaron los antecedentes de este genocida, tiene una condena en proceso, además, durante la condena se fugó y recién a los dos años se lo pudo recapturar y pudo tener otra condena”, dijo.

El hijo de desaparecidos comentó que desde el comienzo de la pandemia, hubieron muchos pedidos de prisión domiciliaria, en muchos casos no se concedió, pero a unos cuantos sí fue concedido. Además, el representante de hijos en San Juan, contó que cuando comenzó la cuarentena, desde la organización se pusieron en alerta para saber cómo iba a actuar la justicia en estos casos. “Como no se fue dando, nos relajamos bastante, pero de todos modos buscaremos antecedentes de represores a quienes les negaron la domiciliara”

Farías indicó que esperan que De Marchi, siga cumpliendo condena en cárcel común. “Hay que ver si es un paciente de riesgo, porque hace años cuando se fugaron también manifestaban serlo y sin embargo paso o que paso”, manifestó el militante.

Por el momento, el represor no fue trasladado a su domicilio y, según informaron fuentes judiciales la defensa acudirá a la Corte Suprema de Justicia para que dé marcha atrás la medida. La posibilidad de la prisión domiciliaria se dio en el marco del tercer megajuicio por delitos de lesa humanidad que se está llevando adelante en la provincia.

Por otro lado, la resolución sienta un precedente importante ya que es la primera vez que este tipo de crímenes reciben el beneficio. No solo esto, sino que a partir del fallo, De Marchi pidió que la prisión domiciliaria se haga extensiva a los procesos en los que fue condenado.

De Marchi fue condenado por el Tribunal Oral el pasado 3 de julio de 2013 a cumplir 25 años de prisión, A los 22 días de la sentencia, De Marchi y Jorge Olivera se escaparon. Ambos estaban detenidos en el Penal de Chimbas y habían tramitado su traslado al Hospital Militar Central Cosme Argerich, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para atenderse por dolencias médicas. Fue la esposa de Olivera, Marta Ravasi, la que había tramitado los turnos de atención en el centro de salud porteño.

El 4 de diciembre de 2015, De Marchi fue apresado por la Policía cuando caminaba por el barrio de Almagro. Por su parte, Olivera fue recapturado el 30 de enero de 2017, en la casa de su esposa, mientras estaba oculto en el baúl de un auto.

Por otro lado, De Marchi está siendo juzgado en el tercer megajuicio por delitos de lesa humanidad, el cual cuenta con otros 30 imputados, entre los que se encuentran militares retirados (como Olivera), expolicías y el exfiscal Federal Juan Carlos Yanello. Dicho debate público fue frenado por el aislamiento social y obligatorio y se reanudaron las audiencias de manera virtual y luego de que la Corte Suprema de Justicia habilitara el regreso a las tareas del Tribunal Oral Federal.