Sucede que durante algunos meses el acuarios estuvo cerrado por lo que este reptil llamado Cammy devoró todo lo que encontró a su paso. Ahora el problemas es que engordo un montón y deberá bajar todos esos kilos de más.

Este caso corresponde a un acuario situado en Manchester en Inglaterra, lugar donde los empleados del SeaLife se llevaron una gran sorpresa al reencontrarse con la estrella del lugar. Al parecer Cammy, una tortuga verde marina de 19 años que aumentó muchísimo de peso durante el cierre de las instalaciones por la pandemia de coronavirus.

Alarmados por la grasa que se había acumulado alrededor del cuello y la cola del reptil, los especialistas idearon un plan nutricional que le permitirá mantenerse saludable. La dieta que seguirá Cammy es estrictamente vegetariana y está conformada por 550 gramos de coliflor, brócoli, y 110 gramos de lechuga al día. Sobre la habitualidad de esta tortuga, sus cuidadores explicaron que “Pese a que la alimentan dos veces al día, la tortuga a menudo se come todo lo que se le cruza en su camino, de ahí la obesidad”.

Otro dato que aportaron desde el acuario son las pruebas de sangre, las cuales demostraron que uno de los factores que podría haber influido en el sobrepeso de la tortuga es que ha comido demasiado de su “obsequio favorito”, ósea los brotes.

Este plan nutricional se complementa con un sistema de entrenamiento. La hoy obsesa tortuga esta obligada a desplazarse entre bloques de hielo ubicados estratégicamente. Por último, esta rutina le impedirá comer junto a su pareja Ernie. Cada tortuga comerá en una esquina del acuario y así se asegurarán que Cammy no devore la comida que no le corresponde.