Bobby es un perro que vive hace tres años en el cementerio municipal de General Roca, Rio Negro. El can decidió quedarse allí luego de que murió su dueño y desde entonces no se aleja de su tumba. Este tipo de historias pareciera que sólo suceden en las peliculas. Una historia muy conocida en el mundo es la Hachiko. Un perro que en Japón esperó cada día durante 10 años a que su dueño, quién había fallecido, llegara a la estación de trenes de Shibuya. 

Hace algunos años se hizo una película sobre el llamada 'Siempre a tu lado', la cual conmovió a muchas personas. En esta ocasión, se viralizó en las redes sociales la historia de Bobby, quién llegó al cementerio municipal General roca durante el sepelio de su amo y jamás se fue. Ahora vive allí y está al cuidado de Daniel Cisterna, un hombre que trabaja como sepulturero: 'Hace tres años murió su dueño y desde entonces nunca ha salido del cementerio'. 

'Se quedó porque su dueño está enterrado acá', explicó Cisterna en una entrevista con Diario de Rio Negro. Pasaron los días tras el entierro y la familia del dueño fue a buscarlo a Bobby, pero el no cambió de opinión en ningún momento y se quedó junto a la tumba de su mejor amigo. Ahora el trabajador se encariñó con el animal y se ha convertido en su nuevo compañero y protector. Incluso entre los empleados le prepararon su propia casita en el cementerio. 

'El perrito seguía arriba de la tumba de su dueño, no se quiso ir. Lo cargaron a una camioneta, pero se bajó y volvió a la tumba de su amo. No se quiere ir, quiere quedarse con su amo', contó el empleado. En ese sentido, el sepulturero reconoció que hay más perros en el cementerio, pero la lealtad, la fidelidad y el amor incondicional que tiene Bobby por su amigo lo conmovieron mucho: 'Me conmovió mucho el cariño que le tenía a su humano'.