Isabel Fernandez: con el arte desde que nació
Benditos Artistas Nuestros volvió a la pantalla de CANAL 13 de la mano del titiritero David Gardiol. En esta oportunidad en una entrevista a fondo con una artista plástica que una maestra cuando ella era una niña le cambió la vida.
Isabel Fernandez es una artista con todas las letras, desde niña estuvo influenciada una maestra que era vecina de ella para convertirse en lo que es hoy. En plena actividad, pasó por Benditos Artistas Nuestros para someterse ante las preguntas de David Gardiol. Él, como artista todo terreno esta vez se puso el traje de entrevistador. Disfrutá de la entrevista completa.
DG: - ¿Fernandez Laisa es doble apellido?
IF: - No, soy Isabel pasa que nadie me llama así, sino que me dicen 'la isa', y por eso cuando empecé a firmar mis obras ponía 'Laisa'. Justamente en esa época que empecé había una novela que la protagonista se llamaba Laisa (NdR: se trataba del papel que interpretaba Flor de la V en la novela Los Roldan), que le decían la 'Gata' y mis conocidos me hacían el gesto de la garra que hacía la actiz. Tampoco tengo nada que ver con Liza Minnelli (risas).
DG: - ¿Cuál fue tu época de conexión con el arte?
IF: - Todo comenzó cuando era chiquita, tenía una mestra que era un hermosa, que la iba a visitar porque vivía cerca de casa y mientras ella trabajaba me ponía a hacer manzanitas, y bueno me quedó eso de encontrar el espacio de silencio para dibujar que tiene todo dibujante. Después en la secundaria ya dibujaba rostros y decidí ir a la facultad a estudiar Artes Plásticas. Pero mi padre siempre nos decía, 'yo les puedo pagar hasta al secundaria, el que quiera estudiar se tiene que pagar la carrera. Yo les sugiero que estudien para maestra y después se pongan a estudiar'. Así que estudié primero para mestra, mientras trabajaba de secretaria en una escuela rural y después estudié lo que yo quería.
DG: - ¿Qué significó la Universidad para vos?
IF: - Un lugar fantástico porque ahí habían maestros increibles, Pepe Villanova, Higo Vinzio, Leonor Carrieri, Eduardo Peñorft, mi gran maestro Luis Suarez Cortez, Adela Cortez y en musica, Catuca Riveros, mestros de excelencia. Un año entero de escultura, un año completo de dibujo, una enseñanza muy buena. Estoy orgullosa de lo que me dieron en la UNSJ y cuando me recibí fue docente hasta que me jubile y seguí dando clases en mi casa (risas), y siempre pintando.
DG: - ¿Cuándo te reconociste como artista plástica?
IF: - Yo tengo un concepto muy particular respecto de eso. Vos podés haber recibido una serie de enseñanzas y herramientas, pero si no seguís estudiando y perfeccionandote solamente sos un profesor de arte. Yo se como hacer un grabado, aunque no lo hago todos los días. Si vos pintas un cuadro al año a mi no me sirve, yo creo que uno se debe cultivar, aprender, ser creativo. A mi de todas las técnicas pintar al óleo me fascina, porque es plástico, da tiempo, vos podes ir conversando mientras creas y además la mezcla química que se da mientras se va secando te va sorprendiendo. Recuerdo que mi profesor Suarez Jodre, nos eseñaba que cada óleo y pintura tenía una química distinta por su estructura y si no sabes mezclarlas no sale lo que uno espera. Otra técnica que me gusta mucho es la acuarela, hay algo llamado 'acuarela baltica', que vos dejas una pequeña manchita y al otro día se expandió y se mezcló con otros colores y es fantánstico. Eso creo yo, que es cuando podes decir, 'si sos artista plástica'. Por ejemplo uno tiene que crear, yo veo un paisaje y algo le cambio, es como hacer una receta de comida, nunca sale como es la receta (risas), cada uno le cambia algo, le pone creatividad.
DG: - ¿Cómo fue tu encuentro con el mundo cuando empezaste a publicar tus obras?
IF: - Mira cada vez que produzco una muestra pienso en le mensaje. Las obras de las muestra que presento tienen detrás un mensaje, un pensamiento filosófico, vivencias de vida, que son lo que me retan y dan la convicción que te respaldan. Respecto de lo que dicen los otros es valiosísimo, pero no es la única versión. La mía es la de producir y la otra que es muy valiosa es como la recibe. Dicen que la decepción más grande es que alguien pase y no mire tu obra. Cuando pasa eso decís. 'uy algo pasó'. Y la otra es que compren obras y te digan que cuando van a sus casas les llama la atención la obra. Nosotros tenemos la función de que la gente vibre, hasta que se enoje con lo que uno hace. Es más una vez hice una muestra sobre la 'agresión', y dije que maravilla voy a poder descargar, pero fue una decepción porque el mensaje no fue el que llegó a la gente, porque quienes veían las obras me decían que eran hermosas y yo quería que vieran violencia, porque usaba soplete, ácido y hasta amoladora, pero no le entraba a la gente ese sentido que quería mostrar sino belleza, hasta vendí obras.
DG: - ¿Has creado una espacio en tu casa para compartir la exploración del arte?
IF:- Sí, la intención es que durante dos horas te escapes de la vida cotidiana. Hay profesoras de arte, bordado, pintura entrre otras, donde todos comparten en mi patio donde hay mucha vegetación un tiempo distinto. Muchas veces llegan medio cabizbajos y se van súper contentos y llenos de energías como si hubieran tomado algo y solo estuvieron esas dos horas compartiendo, aprendiendo y creando. Y sobretodo el orgullo de haber creado algo vos, con una energía que te sirve para la vida cotidiana. Es más aveces les digo, 'si queres ir y no hacer nada, no hagas, anda a leer un libro o ver la vegetación, porque lo importante es cambiar la energía'.