"Messi sería incapaz de poner o sacar un jugador. No es su manera de ser (...) Y además, le estaría faltando totalmente el respeto a Sabella". Javier Mascherano se refirió así a los rumores que ocupan la primera plana de la opinión en la Argentina. Aquellos que indican que "La Pulga" fue quien instó al DT a hacer cambios en el entretiempo del partido debut en el Mundial ante Bosnia tras un primer tiempo en el que el equipo salió a jugar con un sistema que no le permitía al rosarino expresar su mejor versión futbolística.

El mensaje de Mascherano en declaraciones al diario Olé fue profundo, pesado y su interpretación se torna dispar. Puede desprenderse de su palabra una intención de absoluto respaldo a Messi, en su rol de jugador e integrante de un equipo, y a Sabella, en su rol de conductor del mismo. Puede entenderse también, sin embargo, como un mensaje entre líneas de pedido de respeto de unos y otros a la función que cada uno debe ocupar. Ni los jugadores deciden cómo jugar, ni el entrenador debe sublimarse a ellos.

"Messi es un chico que jamás elegiría entre uno u otro compañero. No es así, no lo siente. Y se sentiría mal haciéndolo... Además, hay un entrenador que decide", agregó el "Jefecito" sobre el peso de la decisión del delantero.

La decisión de Sabella de salir a enfrentar a Bosnia con un 5-3-2 y en el entretiempo cambiar el clásico 4-3-3 tras la demostración de la falla en la táctica de los primeros 45 minutos abrió el debate y puso bajo la lupa el trabajo del DT.

Al respecto, Mascherano expresó: "La realidad es que el equipo está más acostumbrado a jugar de una manera, porque el 90% de sus partidos lo hizo con otro esquema. Jugamos algunas veces con cinco atrás, pero una vez fue por ir a la altura, donde hay que jugar de otra manera... Después con Venezuela, que no estaba 'Pipa'; y contra Bosnia sin Leo... Nosotros sabemos cómo es Messi. Y hay una realidad: el grupo le tiene un gran respeto y un gran aprecio a Alejandro. Estaríamos haciendo algo que haría sentirlo mal a él, una falta de respeto. Y segundo, no lo hemos hecho nunca y menos lo vamos a hacer en un Mundial", aseguró.

"Somos Argentina, no podemos fijarnos en el rival", fue la frase de Lionel Messi tras el partido con Bosnia que aún retumba en los rincones del mundo Selección. La sentencia del máximo referente fue terminante a la hora de pedir un cambio en el esquema, al punto de que ayer Sabella puso en el entrenamiento el equipo que mejor hace jugar al astro rosarino.

Sobre el poder de decisión de "Lio" a la hora de armar el equipo, Mascherano expresó: "Él siempre ha dicho de la manera que se siente más cómodo para jugar. Pero también ha aceptado otra cosa, eh. Sino, no hubiéramos empezado a jugar contra Bosnia de esta manera en el debut de un Mundial. No hubiéramos llegado a esto: el equipo habría empezado de otra manera".

Y sobre el rosarino añadió: "Leo entiende de fútbol porque es el mejor jugador del mundo. No es tonto Messi... No es un nene que agarraron de acá y dijo 'yo quiero jugar así y listo'. Él sabe que cada rival es diferente. Obviamente, él después quiere lo mejor para Argentina. Cuando dice de jugar de una determinada manera, lo opina desde el vamos de un partido... Pero sabe que en distintos pasajes del juego, o del Mundial, el equipo irá mutando".

Por último, el "Jefecito" señaló que durante el Mundial tanto Messi como el resto de los jugadores aceptarán las decisiones tácticas de Sabella, a quien respaldó de manera absoluta: "Leo no está cerrado al 4-3-3. Y tampoco hay que caerle como se le ha caído a Alejandro. Porque más allá de que hubo un cambio en el segundo tiempo, nosotros somos los que jugamos. La responsabilidad es compartida, no solo del entrenador. Los jugadores en ningún momento llevamos la pelota donde correspondía. La modificación en el final, además, en gran parte, es mérito de Alejandro. Porque es meritorio meter dos cambios en el entretiempo cuando vas ganando un partido de debut del Mundial, eh. Él pensó que el equipo iba a jugar mejor. Eso es tener no sólo un técnico inteligente, sino un entrenador honesto. Que no le importa el qué dirán sino el bien del equipo".