Es el caso de Teófilo Alberto Daroni, un albañil procesado por el abuso de sus dos hijas biológicas de 7 y 8 años que por un accidente laboral fue beneficiado con prisión domiciliaria. Mientras esperaba la condena, Daroni volvió a abusar de una sobrina.
En Crónicas Policiales de Canal 13, Gustavo Martínez, repasó el caso del abusador que puso en jaque a los controles de la Justicia sanjuanina. 
La historia de Daroni es casi de una película de terror. El hombre fue condenado a 22 años de prisión por abusar de sus dos hijas de 7 y 8. El juez Raúl Iglesias lo encontró culpable pero lo mando a vivir la casa de la hermana hasta que una junta médica definiera si estaba apto para ir a la cárcel. 
Sin embargo, antes de la condena, el juez Benedicto Correa, del Quinto Juzgado de Instrucción lo procesó por el abuso sexual y también lo mandó preso a su casa. Es que otra Junta Médica, en ese momento, consideró que Daroni no podía estar detenido en el Penal por un accidente laboral (previo a los abusos) que lo dejó con dificultades para movilizarse.
El acusado fue a vivir a casa de su hermana hasta que saliera la condena. El caso es que Daroni volvió a cometer otro abuso, esta vez con su sobrina. 
¿Un abuso que se podría haber evitado? Lo cierto es que la hermana del propio acusado fue quien autorizo que vaya a vivir a su casa y lo defendió de todas las acusaciones. Sin embargo su propia hija termino siendo víctima de este pedófilo.
Finalmente, la Junta Medica resolvió esta semana que Daroni había mejorado de su accidente laboral y ya podrá cumplir efectivamente con su condena en el penal de chimbas.