San Expedito: La pandemia, no pudo con la fe de un pueblo
Cada 19 de abril, la localidad caucetera de Bermejo vive una revolución por la fiesta de su santo patrono. Este año, fue un día atípico, pero no pasó desapercibido.
Cada 19 de abril, el pueblo de San Expedito vive una verdadera revolución por la fiesta que se realiza en la localidad caucetera de Bermejo. Este año, todo fue diferente por la emergencia sanitaria contra el coronavirus. Sin embargo, la pandemia, no pudo con la fe de un pueblo que a celebró de una manera atípica el día de su santo patrono.
Canal 13, llegó hasta el lugar y habló con uno de los residentes, Agustín Aguirre, quien contó cómo se las ingeniaron para no dejar pasar desapercibido el día más importante en el pueblo. “Fue un día atípico. Fue pasar un 19 de abril raro para nosotros. La comunidad esperaba mucha gente este año porque los años pasados han sido duros para las zonas rurales. Esperamos mejorar con la fiesta mejorar nuestra economía este años, pero debido a la pandemia, estamos en aislamiento total y ha sido un 19 raro”, contó.
“En la zona de Bermejo tenemos una población de más o menos 600 familias. Somos aproximadamente 2500, 3000 personas. Una aproximación de 300 a 600 familias, porque en una sola casa viven dos o tres familias”, comentó Agustín.
El vecino de San Expedito, contó que en el pueblo, todos viven del turismo religioso. “Todos tienen locales de santería, venden tortitas, pan, leña, todo para el turismo que se queda en la zona. Este año hemos sido golpeados porque no pudimos hacer la única fiesta que tenemos todos los años”, dijo.
Sin embargo, los vecinos, lograron realizar una celebración con características inéditas. Según contó Aguirre, un pequeño grupo de vecinos, se juntaron en el santuario del patrono durante la medianoche del sábado, respetando las medidas de distanciamiento social y demás recomendaciones del protocolo del Ministerio de Salud. Allí, prendieron velas y tiraron fuegos artificiales en honor a San Expedito. “Habíamos prendido la vela, rezamos, éramos menos de 15 personas. Uno se paró delante de la gruta y los demás desparramados en la capilla”, relató.
Pero la fiesta tuvo un nuevo episodio el día domingo. “Nos juntamos nuevamente y lo sacamos en procesión a San Expedito. Un vecino de la zona lo llevó en su camioneta por todo el pueblo cosa que no se ha hecho nunca. Lo llevamos por todas las calles. Todos los vecinos pudieron verlo desde la casa, aplaudió, sacarse fotos. Nos acompañó la policía, porque no se podía hacer amontonamiento”, comentó el hombre.
“La policía, amablemente, se acercó, nos dijo que no podíamos hacer amontonamiento, nos organizaron bien, asique vinimos y cumplimos con San Expedito. Le pusimos velas, agradecimos por la vida que llevamos acá y le pedimos por nosotros y el mundo entero para que se termine la pandemia y podernos reencontrar y darnos un abrazo de alegría y decir que vencimos y terminamos con esto nuevamente”, dijo Agustín a Canal 13.
La pandemia en un pueblo alejado
“Es duro vivir en una zona alejada donde no tenemos medios de comunicación, transporte, no podemos llegar a los lugares de las grandes ciudades para comprar lo que necesitamos. Ahora, estamos con algunos remises que nos acercan, vamos y volvemos. Van siempre una o dos personas y compran para todos”, comentó el vecino.
Además, dijo que “desde el municipio de Caucete nos están prestando dos movilidades para que vaya la gente a cobrar y hacer sus compras. Vivir en Bermejo es complicado y duro. Sufrimos mucho esto”.
“Del Covid-19 nos cuidamos por los medios. Nosotros no tenemos barbijos porque ni sabemos cómo hacerlos, alcohol en gel no tenemos, nos falta de todo. El municipio no nos trae. No se han hecho campañas educativas. Estamos haciendo aislamiento porque estamos escuchando los medios pero acá no vino nadie”, aseguró Agustín.
“Estamos poniéndonos mal por el coronavirus, pero tampoco nos han informado nada del dengue. No tenemos educación sanitaria para nada. Estamos en un momento complicado. Tener acceso a esas cosas son complicadas”, finalizó.