Un sanjuanino que viene soñando en grande desde hace años consiguió hace días dar pasos firmes en su sueño. Triunfar de la mano del Brasilian Jiujitsu. Se trata de Cristhian Sefair, un luchador que compitió en el Open Argentina en dos categorías, se llenó de experiencias, y hasta consiguió hacer un podio, según contó en vivo este martes en Dale Luz.

Si bien a lo largo del año participó de varios torneos importantes, el Open Argentino es un evento de artes marciales de connotaciones internacionales, por lo que su importancia es grande. Este joven luchador dejó en claro que como primera experiencia fue grandioso para él y otros dos sanjuaninos que como el compitieron. ‘San Juan nunca había dicho presente en esta competición, por lo que era importante para nosotros estar. El haber hecho un podio para mí es un paso muy grande’, comentó.

Es que la experiencia de compartir con otros luchadores de esta rama del Jiujitsu, ya sean de otras provincias o de otro país, fue muy gratificante y enriquecedor para Cristhian, según él mismo califico.

Cristhian pertenece a la categoría que va de los 77 a los 82 kilos. Es cinturón marrón y sueña con llegar a ser negro. ‘Hay una gran diferencia en cuanto a lo físico y técnico. Además, me gustaría competir en Brasil, la tierra donde nació esta rama del Jiujitsu, y conocer muchos de las leyendas de la disciplina’, confesó el joven.

Entre las cosas que destacó de la competencia internacional resaltó la figura de los árbitros y la puntualidad de las peleas. ‘Si dicen que empieza a las 9, empiezan a las 9’, contó Cristhian que destacó también torneos en Jujuy y Salta, pero a ninguno ponderó por encima del que tuvo la oportunidad de competir en Capital Federal.

Cristhian contó que actualmente carga con una tendinitis en su rodilla izquierda por la que, si bien la idea era tener continuidad en la competencia, no quiere apurarse en su recuperación por miedo a un agravamiento de esta lesión. Es por ello, que se enfocará en seguir entrenado, puesto que esa parte del practicar Jiutjisu le da paz. ‘Cuando entreno normalmente siento paz y tranquilidad, porque mi cuerpo llegó a un límite y tengo paz en la mente’, comentó.