Luego de cinco partido sin convertir, Matías Giménez (23 años) volvió al gol en la victoria 4-1 ante Brown de Puerto Madryn. De esta manera se transformó en el máximo artillero del equipo con 10 alegrías. Con ese triunfo San Martín escaló décimo lugar y sigue en puestos de clasificación al Reducido de la Primera Nacional. 

El goleador, que acumula 21 tantos con la casaca verdinegra, estuvo este miércoles en 'Dale Luz' y contó el gran momento que atraviesa el equipo. No ocultó su desesperación cuando no convierte y aseguró que San Martín 'está para pelear por el segundo ascenso a Primera. Sabemos que es difícil el ascenso, pero nosotros sentimos que ningún equipo nos pasó por encima. Estamos convencidos de lo que hacemos y sí nos falta mejorar de visitante. El objetivo es clasificar lo más arriba posible en la tabla'.

El 16 de julio 'Klinsmann' (así le decían en la escuelita) marcó el primer gol que abrió la goleada ante Agropecuario en Concepción. Luego vino la sequía y sufrió cinco partidos sin anotar. Es más en los últimos tres partidos perdió la titularidad. El sábado pasado entró en el segundo tiempo ante Madryn y volvió al gol. 

'El gol para el delantero es muy importante. Tengo el apoyo del grupo y el cuerpo técnico. Sabía que el gol iba a llegar en cualquier momento. El tema psicológico se trabaja de forma individual, a mi me afecta no convertir, me desespero. Lo trato de manejar con tranquilidad así se cortan estas rachas'.

Este miércoles se cumplen tres años de su debut en el plantel profesional de San Martín. Aquel 24 de agosto el sanjuanino reemplazó a Martín Bravo a los 30 minutos del segundo tiempo. Lamentablemente el conjunto de Concepción perdió 1-0 ante Estudiantes de Buenos Aires como local. 

'Hoy justo cumplo 3 años desde que debuté en la Primera de San Martín.  La base para llega es sacrificio y humildad. Los sanjuaninos siempre esperamos nuestro momento y hay que saberlo aprovechar. Hay momento que se la pasa bien y otro que no, pero el apoyo de la familia y mis amigos es clave'. 

En el mercado de pases anterior, recibió dos ofertas para emigrar a la Primera División y las rechazó. Godoy Cruz y Unión de Santa Fe pusieron los ojos en el goleador.  'Decidí no irme a Godoy Gruz porque soy hincha del club y fui toda mi vida a la cancha. No importa si está en primera, me mueven más los colores. Después vino lo de Unión, pero al club la oferta le pareció insuficiente y no sé si tenía ganas de irme a mitad de torneo. Quería quedarme', pero al final del este certamen no cerró las puertas para seguir creciendo, 'luego veremos. Si ascendemos me gustaría quedarme, pero lo decidiré en su momento'. 

El rubio delantero espera seguir los pasos de Emmanuel Mas. 'Uno sueña siempre con llegar a Europa. Se que es difícil, pero el sueño siempre está. Me gustaría ser un jugador como paso con Emmanuel Mas. Estuvo en San Lorenzo fue campeón, luego pasó a Boca, estuvo en Europa y en la Selección. Ojalá pueda seguir sus pasos'.

Giménez contó cómo llegó a San Martín y en qué momento se dio cuenta que el fútbol ya no era un deporte de entretenimiento para él .'Voy al club desde los 7 años, Hacía tenis, skate y el fútbol era un hobby para mi. Después a los 15 años lo empecé a tomar más en serio cuando empezamos a jugar los torneos de AFA, a viajar. Nos levantábamos temprano, nos cuidábamos en las comidas. Ahí decidí que era lo que quería. Después una vez que terminé el secundario, mi familia me ayudó para que pueda continuar'

'Cuando todo era color de rosas, un un momento que hizo un click en al vida de Matías, 'estuve a punto de dejar el futbol y bueno a los 6 meses siguientes debuté y me cambió la vida'.

SU AMOR POR LOS PERROS

'Me gustan los perros, tengo en la casa con mis viejos un Golden que le reglaron a mi hermana y cuando voy lo saco a pasear. Es juguetón y rompe todo'.

SU INDEPENDENCIA DE SUS PADRES

'Hace un tiempo que vivo solo. Pude dar ese paso y lo hice para cuando llegue el día que me toque irme, no me cueste tanto ese despego'.

SU APODO Y DE QUÉ JUGABA DE CHICO

'Me dicen Klinsmann desde la escuelita. El primer día me agarró un profesor y me dijo a vos te vamos a decir Klinsmann. Y no sabía que jugador era, porque era chiquito. Mi puesto en la cancha siempre fue de delantero, pero cuando el arquero no iba en la escuelita atajaba'.