Sportivo golpeó temprano y se quedó con un clásico picante
El Víbora venció por 1-0 al Verdinegro con gol de Tapia, en un atrapante y polémico partido que se disputó en un Estadio San Juan del Bicentenario colmado por ambas parcialidades. Hubo polémicas, expulsados y mucho color en el gigante de Pocito.
Todo el pueblo futbolero sanjuanino esperaba este encuentro y, los protagonistas no decepcionaron para nada. Fue un clásico encendido desde lo futbolístico, donde hubo por momentos pierna fuerte (como todo clásico), color en las tribunas, y un tempranero gol de Ricardo Tapia, que a los 15 minutos del primer tiempo, puso a gritar a la mitad del Estadio San Juan del Bicentenario.
San Martín y Sportivo brindaron un verdadero espectáculo en el Estadio San Juan del Bicentenario, reeditando una nueva versión del clásico sanjuanino, que los “Puyutanos” terminaron ganando por un solo tanto.
Después del gol puyutano, el “Verdinegro” se sintió herido en su orgullo, y lo fue a buscar, encontrándose con con el palo en una oportunidad y con el gran reflejo del arquero de Sportivo, Juan Boeiro, que tuvo importantes intervenciones cuando lo exigieron.
En el segundo tiempo, San Martín no se olvidó de presionar e ir adelante en búsqueda del gol del empate, aunque de forma desordenada, atacaba, pero se encontró con el palo nuevamente y con la seguridad de Boeiro, quien para esa parte del partido ya era una de las figuras.
Un detalle tanto particular como picante, se dio a mediados del complemento, cuando el árbitro mendocino, Gabriel Araujo, expulso al “Pampa” Gelabert, por parte de San Martín, y a Decimo (ex Verdinegro) que hacía su presentación en el equipo “puyutano” , y solo duro 17 segundos en cancha, ya que tras un pelota disputada con el experimentado mediocampista pampeano, se pegaron feo, y el colegiado no dudo en mostrarles la roja a los dos jugadores.
Ya con el 1 a 0 en su poder y, quedando pocos minutos por jugarse, Sportivo recurrió a refugiarse en su campo, un poco también empujado por el ímpetu de San Martín, que iba ciego al ataque en búsqueda del ansiado empate.
En el final del encuentro, el verde y blanco, tras un perfecto contrataque marco el 2 a 0, pero el árbitro mendocino lo anulo, quedando solo arriba por un gol.
La alegría fue toda “Puyutana” en el Bicentenario, tanto en la cancha con el festejo de los jugadores, como en las tribunas, donde se festejó, se gritó y, el hincha se permitió emocionarse por haberse desquitado de aquel clásico que fue “verdinegro” allá por 2012. Poco le importó a Desamparados lo que se dijo en la previa, poco le importó la diferencias de categorías y plantel, ya que se quedó con el clásico sanjuanino por aquel tempranero gol de Ricardo Tapia que sello el 1-0 y pinto de verde y blanco el gigante de Pocito.