La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), que reemplazó a la AFIP, ha intensificado sus controles sobre los movimientos financieros en billeteras virtuales mediante la resolución Nº 4298. Aunque la normativa fue establecida en 2018, los límites para saldos y transferencias que requieren mayor vigilancia han sido ajustados para adaptarse a nuevas realidades económicas. El objetivo de esta medida es verificar la legitimidad de los fondos y prevenir el uso de plataformas digitales para actividades no declaradas.

De acuerdo con la resolución Nº 4298, las billeteras virtuales deberán informar cuando los saldos superen los $700.000 o cuando las transacciones excedan los $400.000 por operación. Esto implica que los usuarios con saldos mensuales superiores a $700.000 deberán poder justificar el origen de esos fondos ante ARCA. Asimismo, las transferencias entre aplicaciones o cuentas bancarias que superen los $400.000 estarán sujetas a una revisión más rigurosa.

Aunque estos límites no son restricciones en sí, sí activan un sistema de alerta para el organismo. A partir de estos montos, ARCA podrá solicitar a los usuarios la documentación necesaria para probar que los fondos provienen de actividades legítimas y declaradas. Por debajo de estos umbrales, los movimientos financieros suelen pasar desapercibidos para la agencia.

Es importante destacar que, aunque los montos menores a estos límites no suelen generar una revisión inmediata, no están exentos de justificación. ARCA exige a las entidades financieras que informen sobre todas las transacciones superiores a los montos establecidos, lo que facilita su detección. Los movimientos por debajo de esos umbrales también requieren ser reportados, pero la probabilidad de que sean detectados es menor.

Esta actualización en los controles busca combatir la evasión fiscal y evitar que las billeteras virtuales se utilicen para actividades ilícitas, como el blanqueo de capitales. Además, ARCA pretende que las empresas proveedoras de billeteras virtuales colaboren activamente en la detección de transacciones sospechosas.

Un aspecto crucial de la resolución es que serán las propias billeteras virtuales, y no los usuarios, las encargadas de informar sobre los saldos y transacciones que superen los límites establecidos. Esto implica que los proveedores de estos servicios deben implementar mecanismos de control interno más estrictos para cumplir con los requerimientos de ARCA.

Además, las plataformas deberán actualizar sus reportes cada seis meses, ajustando los montos a los cambios en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), lo que permitirá que los límites se mantengan actualizados con la inflación. Esta variabilidad en los topes añade un componente de flexibilidad que tanto usuarios como empresas deberán considerar.

Para las plataformas de billeteras virtuales, cumplir con estas nuevas exigencias representa un desafío adicional, ya que deberán destinar recursos a asegurar que todas las transacciones que superen los $700.000 mensuales y los $400.000 por operación sean correctamente reportadas y justificadas ante ARCA.