La moratoria que la administración orreguista lanzó en mayo para alentar el pago de impuestos le generó al Estado provincial unos $5.400 millones, lo que equivale a un poco más del 33% de la deuda total que se puso al cobro. El incentivo para los morosos sanjuaninos fue prorrogado hasta mediados de este mes, aunque con beneficios más acotados.

El principal atractivo de la moratoria fue el descuento del 100% de los intereses si el pago de la deuda por cualquier impuesto local se hacía de una sola vez. Con ese formato, el plan se prorrogó en tres oportunidades, hasta que venció definitivamente el 31 de octubre.

Fuentes calificadas del Ministerio de Hacienda le confiaron a Canal 13 que bajo la moratoria se normalizó deuda por un total de $6.700 millones. El Estado ya embolsó $5.400 millones provenientes de contribuyentes que eligieron pagar de contado para acceder a la quita de intereses y el resto, $1.300 millones, corresponde a planes de pagos en cuotas.

Los $5.400 millones que ya ingresaron a las arcas públicas representan algo más de un tercio de los $16.000 millones de la deuda que Rentas puso al cobro bajo la modalidad del plan de incentivos. Exactamente, equivalen al 33,75.

Si bien lo efectivamente recaudado está lejos del volumen total de las obligaciones impagas de los sanjuaninos, en la cartera que dirige Roberto Gutiérrez destacan que la moratoria ayudó mucho. Sostienen que, de otra manera, no hubiera sido posible cobrar ese dinero sin llegar al desgaste de la instancia judicial.

Los planes de pago significan una expectativa de cobro para el Estado, ya que son una promesa de cancelación de deuda por parte de los contribuyentes. Las fuentes revelaron que representaban inicialmente unos $3.000 millones, pero advirtieron que muchos contribuyentes no pagaron las primeras cuotas, que sus planes de pago se cayeron y que solamente quedan en pie $1.300 millones.

Las cifras que trascendieron indican que de la deuda normalizada, el 85% es administrativa. El otro 15% pertenece a deudores que fueron intimados varias veces y que como no acusaron recibo, la provincia los demandó en la Justicia para salden sus obligaciones.

Como sucedió a partir del primer mes de la moratoria, el impuesto por el que más se recaudó fue Automotor. Las fuentes indicaron que aproximado representó 50% de lo percibido, en tanto que la otra mitad fue fruto de Ingresos Brutos, Inmobiliario y Sellos.

Los incentivos de la moratoria siguen vigentes hasta el 15 de este mes, pero con un cambio sustancial. Los que adhieran en lo que queda hasta esa fecha y cancelen de contado, obtendrán un descuento menor: la quita de intereses por pago de contado es ahora hasta el 10%.

La recaudación local de impuestos es monitoreada con lupa por la gestión orreguista en medio de una profunda crisis económica que afecta a todo el país, donde todos los recursos estatales parecen escasos.  Se trata de la segunda fuente de financiamiento que tiene San Juan (la primera es la coparticipación federal) y es vital para juntar el dinero que la provincia necesita mes a mes para prestar servicios clave, como salud, seguridad y educación, además de atender el pago de sueldos y la ejecución de obras.

El contexto de crisis no ayuda. La recaudación de todas las provincias está por debajo de la inflación, lo que implica que el Estado local sigue perdiendo poder de pago como la gran mayoría de los hogares argentinos. Sin ir más lejos, lo recaudado entre enero y septiembre asciende a $152.801 millones y aunque ese volumen representa un aumento de 203% interanual, es menor al 209% de incremento que tuvieron los precios en el mismo periodo. Dicho en otras palabras, los gastos crecieron 6 puntos más que los ingresos.