Cuando el sector no logra salir de una crisis que atraviesa desde hace años y parece profundizarse cada vez más. Luego de haberse conocido en Banda Ancha que 9 bodegas sanjuaninas esta temporada decidieron no producir, ahora también se conoció una tendencia que viene a romper un poco con ese aspecto negativo y es que se disparó la comercialización del vino en latas.

Las tendencias aparecen y se van ocasionando de acuerdo a las nuevas generaciones. Hace más de una década el espumante ganó terreno entre los jóvenes y el bag in box también tuvo un crecimiento.

Pero ahora las latas ganaron ese crecimiento en el mercado y tanto las góndolas como los locales nocturnos y también los restaurantes comenzaron a ofrecer las latitas con sus varietales.

El dato se desprende del informe de mercado interno del INV. Cuando la comercialización del vino estuvo en baja en los meses de enero y marzo, en este último mes el vino en lata creció un 123% de forma interanual.

Esto significa que en marzo del 2023 se comercializaron 884 hectólitros y en marzo de este año ese número creció a 1.973 hectólitros, es decir 197.300 litros de vino en latitas.

Este panorama es alentador ante un escenario que se pinta gris en los primeros meses de este año, siendo enero y marzo con caída y sólo febrero con saldo positivo en el mercado interno. En enero la baja fue -9,4%, en febrero hubo +0,7% y marzo -9,6%.

Lejos del litro o medio litro de vino, la lata se caracteriza por ser una medida más reducida y una gran opción para aquellos que sólo quieren degustar un vino en una medida más acotada.