En Villa Fiorito, hubo un trágico suceso en el que un niño de 9 años perdió la vida después de ser atropellado por un patrullero. Su hermano de 5 años, quien viajaba con él, sufrió múltiples fracturas pero se encuentra fuera de peligro. El policía al volante del vehículo quedó detenido en medio de una investigación en curso.

El incidente ocurrió en la intersección de las calles Necol y Pio Baroja, cuando Agustín Pogonza y Tomás Yedro, primos que se dirigían a casa después de ver la final de la Copa Libertadores con sus familiares, se desplazaban en una motocicleta. El joven Agustín transportaba a su sobrino de 5 años en la parte trasera de la moto, mientras que Tomás estaba acompañado por su hermano de 9 años, Bautista.

El accidente tuvo lugar cuando el patrullero chocó por detrás a la moto de Agustín, lo que causó que el menor que viajaba con él resultara herido y quedara en el suelo. Ante la situación, Tomás intentó llevar al niño de 5 años al hospital. Sin embargo, durante su traslado, el patrullero retrocedió y colisionó nuevamente con la motocicleta.

Como resultado del segundo impacto, el niño de 9 años falleció en el acto debido a un "aplastamiento", según informaron las autoridades. Su hermano menor fue trasladado al centro de salud con "múltiples fracturas".

El policía bonaerense al mando del patrullero, un joven de 21 años, fue detenido y está a la espera de ser interrogado por el fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFIJ) 10, especializada en Delitos Culposos, a cargo de Carlos Patricio Pérsico. Las investigaciones están en manos de la Gendarmería Nacional (GNA), y se centran en los motivos de la presencia del patrullero en la zona, ya que no estaba en su jurisdicción ni en su horario habitual de trabajo. Además, se está investigando si los efectivos estaban involucrados en actividades ilícitas, como venta de estupefacientes o extorsión.

Hasta el momento, la policía ha estado recopilando imágenes de cámaras de seguridad en la zona y ha secuestrado el teléfono móvil del oficial detenido. 

Tomás, el hermano mayor del niño fallecido, describió el impactante choque: "Estábamos con mi primo y mis hermanos volviendo a nuestra casa. Veníamos de ver el partido de Boca. A mi primo lo perdí de vista porque lo chocaron antes". Luego relató que no esperaba que el patrullero volviera a chocarlos.

El tío de los menores también denunció que los policías que iban en el patrullero intentaron huir y, ante esta situación, comenzaron a disparar balas de goma en medio de la comunidad.

Una vecina testigo del incidente explicó que el patrullero iba a gran velocidad y no tenía activada la sirena. "Salió huyendo, fue una irresponsabilidad total. La criatura estaba tirada en el suelo y la arrastró por el piso con el auto. Fue tremendo lo que pasó, la policía no tuvo piedad", detalló.