Un niño de 10 años murió el lunes en San Miguel de Tucumán tras recibir un disparo en la cabeza mientras se encontraba en la casa de su amigo.

Los investigadores no descartan ninguna hipótesis. Hay dos personas que fueron detenidas.

“A todos los amigos y conocidos de Santy, queremos comunicar que ha fallecido lamentablemente. Siempre estará en nuestro corazón”, escribió su mamá

Su familia contó que el nene se levantó a las 9 de la mañana del lunes. Minutos después salió para la casa de su amigo en el barrio 130 Viviendas para ir jugar.

El menor entró a la casa de su vecino y a los pocos minutos recibió un disparo. Fue trasladado al Hospital de Avellaneda donde le hicieron una tomografía y fue intubado. Pero como estaba delicado, fue nuevamente trasladado al Hospital de Niño Jesús ubicado con síntomas de muerte cerebral, un orificio de entrada y salida, y pérdida de masa encefálica. Estuvo internado pocas horas hasta que se confirmó su muerte.

El Personal de la Comisaría N°10 de San Miguel de Tucumán y de Homicidios de la Policía realizó pericias y se secuestraron elementos importantes para la investigación.

Según determinaron los investigadores, dos vecinos indicaron que se escucharon dos disparos. El nene habría sido encontrado ensangrentado y en el suelo frente a una casa. La primera hipótesis es que fue “un disparo por la mala manipulación de un arma”.

Todo ocurrió cuando la víctima se encontraba jugando en la cocina del domicilio de una vecina junto a otros niños.

Uno de los aprehendidos, identificado como “Ojoroso” - de 19 años y quien vive enfrente del lugar del hecho- ingresó a la casa y, por razones que aún se encuentran bajo investigación, habría realizado dos disparos de los cuales uno de ellos impactó en la cabeza del nene de 10 años.

Los vecinos declararon haber visto a una persona pasar en moto al momento del ataque.

Los investigadores a cargo del caso allanaron dos domicilios, y en uno de ellos se procedió al secuestro de tres celulares perteneciente a los familiares de los detenidos, otro teléfono propiedad de uno de los aprehendidos, un pendrive, dos gorras, prendas de vestir, dos vainas servidas y fragmentos de proyectiles. Además, se halló marihuana, que quedó incautada, y por ello también intervino la Dirección Drogas Peligrosas Capital.

Si bien “Ojoroso” sería el autor del disparo, la Justicia ordenó la aprehensión del otro hombre, de 34 años, ya que también se encontraba en el lugar.

En la causa interviene la Unidad Fiscal de Homicidios N°1, a cargo del fiscal Pedro Gallo, y el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales del Ministerio Público Fiscal de Tucumán.

Con información de Diario Crónica