En las últimas horas, el informe preliminar de la autopsia reveló detalles estremecedores sobre la muerte de Kiara Jazmín Caro, la niña de siete años hallada sin vida a orillas del río Lules, en Tucumán.

El análisis forense determinó que la menor murió por "asfixia por inmersión", es decir, se ahogó. Sin embargo, el informe también expuso que tenía golpes en la cara y la cabeza, especialmente en la frente y el lado izquierdo, aunque aún no se esclareció si fueron causados por un ataque o por el impacto contra las piedras del cauce del río.

Un dato clave es que Kiara había tragado barro, lo que indica que, mientras luchaba por su vida, respiró tierra del fondo antes de finalmente morir ahogada.

Por la muerte de la menor, su madre, Daniela Fernanda Ávila, está detenida e imputada. Para el fiscal del caso, Pedro Gallo, no se trató de un accidente, sino que la madre abandonó a la niña en un lugar peligroso y vulnerable, donde agonizó sin posibilidad de pedir auxilio.

Según la investigación, alrededor de las 2 de la madrugada del domingo, Ávila se retiró con su hija de los corsos del barrio Ex Ingenio de Lules para dirigirse a la casa de su pareja, Matías Sebastián Paz, con quien había discutido horas antes. Para acortar camino, cruzó con Kiara el río por una zona riesgosa conocida como "Puente Negro", sin considerar el peligro.

Horas más tarde, la mujer se presentó en la comisaría para denunciar la desaparición de su hija, asegurando "no recordar nada" de lo ocurrido la noche anterior. En ese momento, se encontraba en estado de alcoholización.

Durante la audiencia, el fiscal Gallo enfatizó:

“Las características del hecho lo hacen especialmente gravoso. Hablamos de una niña de siete años, dejada sola en medio del cauce del río en plena noche, sufriendo golpes y agonizando, mientras la imputada volvía a los corsos y daba datos falsos que entorpecieron la investigación”.

La Justicia de Tucumán imputó a Daniela Ávila por el delito de "Abandono de persona seguido de muerte agravado por el vínculo". Además, el juez Bernardo Daniel L'erario dictó tres meses de prisión preventiva, al considerar que existe riesgo de fuga y entorpecimiento de la causa.

Dada su condición emocional, se ordenó su traslado a un hospital psiquiátrico debido a un cuadro de "ansiedad severa".

El caso ha generado una profunda conmoción en Tucumán y en todo el país, mientras la investigación avanza para determinar con exactitud qué ocurrió en las últimas horas de la pequeña Kiara.