El Ministerio Público Fiscal de la provincia de Mendoza presentó pruebas contundentes contra Ariel Ignacio Moya Rubinow, psicólogo sanjuanino, docente y estudiante de Filosofía, acusado de querer matar a su novia sanjuanina de 24 años. El próximo martes 3 de mayo pedirán la prisión preventiva del acusado.

Según informó el Diario el Sol, el próximo martes 3 de mayo, la fiscal de Homicidios Andrea Lazo solicitará la prisión preventiva en contra del psicólogo por tentativa de femicidio. Además, la fiscalía tendría múltiples pruebas que acreditan el accionar de Moya Rubinow.

En los últimos días, la representante del Ministerio Público Fiscal lideró la reconstrucción del hecho en el domicilio donde habría sucedido todo. La conclusión primaria que hicieron los investigadores, es que la versión que aportó el profesional mientras se desarrollaba la investigación no coincide en nada con el material probatorio que lo incrimina.

Fiscalía cuenta con una serie de pruebas documentadas y testimonios que sostienen la teoría de que Moya quiso matar a la joven durante una discusión que tuvo con su pareja, y que buscó hacerles creer a las pesquisas y a los familiares sobre el intento de suicidio.

Entre las pruebas que presentaría el Ministerio Público fiscal, se destacan las declaraciones de los profesionales del Cuerpo Médico forense y del Hospital Central de Mendoza, que la víctima presentaba quemaduras en el cuello provocadas con una cuerda por una tercera persona.

Además, del relato de los médicos que dijeron que inconsciente la joven gritó, ‘me quiere matar, me quiere matar’, sumado el testimonio de la madre de la víctima, quien aseguro que la joven le escribió en un papel que Moya intentó matarla.

Otro de los testimonios que se sumaría a la causa es el de la psicóloga de la joven, quien aseguró que la víctima no presentaba tendencias suicidas.

El hecho:

En la noche del 26 de febrero, hubo una discusión entre la victima (24) y Ariel Ignacio Moya Rubinow (41) en un departamento ubicado sobre calle España, capital de la provincia de Mendoza. Según el primer relato de Moya, luego de la discusión, este salió a fumar un cigarrillo a una plaza cercana y cuando volvió la encontró colgada de una soga en un placard.

Sin embargo, este en vez de llamar al 911 primero llamó a su psicóloga para preguntarle qué debía hacer, esto les llamó la atención a los investigadores. Mientras, la joven llegaba casi sin vida al Hospital Central de Mendoza donde lograron estabilizarla y permaneció semanas en Terapia Intensiva.

Con el paso de las horas, la declaración de los médicos forenses y del Central desmoronaron la versión de Moya y aseguraron que se trató de un intento de homicidio.