El doble crimen en Alejandro Korn dejó a todos sin palabras. Al pasar las horas  se conoció la carta que dejó la mujer que asesinó a su hija de cuatro años, a su esposo y después se suicidó.

En un papel escrito por ella, dijo: “Anto (la nena) no vio nada ni contó nada de todo lo que creen que vio. Pero cuando nos miramos a los ojos, supe la verdad. Pero no nos van a matar ustedes. Me los llevo yo conmigo”. Esto se conoció cuando un compañero de trabajo de la víctima, Juan José Orgeira, fue hasta su casa preocupado porque no se había presentado para tomar el relevo ni respondía el teléfono.

Luego de un llamado a la policía se descubrió la escena del crimen. En la planta alta de la vivienda encontraron el cuerpo de Orgeira, un policía federal de 45 años que se desempeñaba en la División de Explosivos Presidencial dentro de la Superintendencia de Seguridad y Custodia.

Abajo estaban los cuerpos de la nena, de apenas cuatro años, y el de su mamá, Vanesa Santi, quien se habría suicidado tras cometer el doble crimen.

La carta completa

“Somos una familia hermosa que nos amamos, y nada ni nadie nos va a poder separar. Mi bebé es mi vida. Desde que supe que estaba embarazada que la cuido. Ni un minuto la dejé sola. Solo yo la cuidé, nadie más. El único que seguro está conmigo. Mamá y bebé siempre juntas. Las nenas decíamos nosotras. A todos lados con mi bebé siempre abrazadita al peto (el pecho de mamá).

"Sólo mi bebé y yo sabemos cómo nos robaron el alma, la alegría, la vida. Hicieron todo para que nos fuéramos, pero nos vamos a ir juntos, en familia. Anto no vio nada ni contó nada de todo lo que creen que vio. Pero cuando nos miramos a los ojos, supe la verdad. Pero no nos van a matar ustedes. Me los llevo yo conmigo.

"A mi esposo, que nos ama y nos cuida. La persona más íntegra que conocí en mi vida. Que me cuidó desde que lo conocí a los 13 años míos y 17 de él. A los 20 años de conocernos, nos casamos y tuvimos a la bebé más hermosa, Antonia, mi bebé. Me los llevo conmigo a los dos”.