Una desgracia que pudo terminar con la muerte de dos personas ocurrió en las afueras de Mar del Plata. El viernes un menor de 11 años y su padre volcaron, cuando el pequeño manejaba a pedido de su progenitor que iba borracho. La ANSV tomó una decisión en las últimas horas. 

De acuerdo a lo informado por medios nacionales, el hecho ocurrió el viernes en la ruta 226, a la altura del paraje Santa Paula, 10 kilómetros al oeste del centro marplatense.

Luego de producirse el vuelco, la Agencia Nacional de Seguridad Vial en conjunto con el Municipio de General Pueyrredón tomaron la decisión de suspenderle la licencia al hombre alcoholizado, por haber puesto en riesgo la vida de él y su hijo. 

Al momento del vuelco en una zanja cuando el pequeño conducía, el progenitor "tenía 1,43 de alcohol en sangre". El organismo informó que el sujeto deberá realizar también un examen psicofísico para así determinar su aptitud al volante. 

De acuerdo a fuentes cercanas al hecho, el niño señaló que su padre le cedió la conducción de la camioneta familiar debido a que no podía continuar manejando por el estado en el que se encontraba.

Según precisó el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano, "los borrachos no pueden estar al volante y los niños tampoco". En este sentido, agregó: "como Estado nacional no vamos a permitir que estas cosas sigan sucediendo, por eso pedimos la suspensión, y también vamos a pedir al Juzgado de Familia que intervenga en la protección del niño".

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(Fuente: Minuto Uno)