En una reciente resolución, el Ministerio de Defensa de Argentina, liderado por el ministro Luis Petri, prohibió el uso del lenguaje inclusivo en las Fuerzas Armadas y organismos descentralizados dependientes de la cartera. La medida, que se respalda en normativas constitucionales y documentos militares, advierte sobre posibles sanciones para quienes no cumplan con la nueva disposición.

La resolución, emitida el pasado viernes, señala que términos como “generala”, “sargenta”, “soldada” o “caba” no podrán ser utilizados por los integrantes de las fuerzas militares. Aquellos que incumplan con estas reglas de comportamiento podrían enfrentar sanciones en sus respectivos ámbitos, aunque la resolución no especifica las consecuencias precisas.

La medida, parte de un "plan de reordenamiento de las Fuerzas Armadas", se encuadra en la visión del ministro Petri de reforzar la disciplina y reivindicar el rol de las Fuerzas Armadas en el contexto democrático y constitucional. Desde el Ministerio de Defensa, anticiparon una campaña de difusión y capacitación del personal para implementar efectivamente el cambio en el uso del lenguaje.

La decisión no tomó por sorpresa a la cúpula militar, ya que se había anticipado la posibilidad de modificar este aspecto del código militar desde la llegada de la nueva gestión al ministerio. El cambio se suma a una serie de modificaciones estructurales y recambios generacionales impulsados por el ministro Petri desde su asunción.