Durante la tarde del viernes 15 de marzo, la localidad bonaerense de Blaquier, perteneciente al partido de Florentino Ameghino, fue escenario de una tragedia que conmocionó a la comunidad. Seis hombres perdieron la vida en un desafortunado intento de rescate en un pozo de cloacas.

El fatídico episodio comenzó alrededor de las 18:30 horas, cuando Ricardo Bottega, de 60 años y reconocido bombista del pueblo, fue contratado para realizar labores de mantenimiento en un área conocida como “el cigarro”. Según informaron medios locales, Bottega ingresó al pozo sin una máscara de protección y habría inhalado gas butano, emanado del líquido de los desechos cloacales.

Ricardo Bottega fue el primero en morir en el pozo. Tenía 60 años

Al percatarse de la situación, Ezequiel Rodríguez, responsable de las cloacas, solicitó auxilio, lo que movilizó a vecinos con la intención de colaborar en el rescate. Sin embargo, desconociendo el peligro del gas, cinco personas se sumaron al intento de salvar a Bottega, con el mismo desgarrador desenlace.

“A medida que descendían con esa finalidad sufrieron las consecuencias, presumiblemente, asociadas a la inhalación de gases concentrados”, indicaron desde el municipio de Florentino Ameghino en un comunicado.

Las víctimas de esta tragedia fueron identificadas como Carlos Reinger, bombero voluntario de 39 años; Alejandro Centeno, de 36 años; Mateo Pellegrino, bombero voluntario de 27 años; Juan Ramón Sanchez, de 50 años; y Nicolás Sánchez, bombero voluntario de 28 años e hijo de Juan Ramón. Todos perdieron la vida en el interior del pozo cloacal.

Aunque las causas exactas del incidente aún están bajo investigación, la hipótesis principal apunta a que efectivamente las muertes fueron consecuencia de la inhalación del gas butano que se desprende de las aguas servidas.

La Ayudantía Fiscal de Ameghino está llevando a cabo la investigación correspondiente, mientras que los cuerpos de las víctimas fueron trasladados a Junín para la realización de la autopsia solicitada por la justicia.