La noche de los Martín Fierro fue una fiesta para todos los presentes y los fanáticos pero, por otro lado un momento tenso para otros.

Luego del escándalo por la denuncia de Lucas Benvenuto por el supuesto abuso de Jey Mammon cuando era menor, el ex conductor decidió participar de la gala porque "La Peña", estaba nominado como mejor programa musical.

Jey llegó al Hotel Hilton casi media hora después del comienzo de la ceremonia, tal como anunció en sus redes sociales dejando de lado las críticas y comentarios sobre él.

Ante la vista de todos, Mammon ingresó al recinto en compañía de su amigo Nacho Gauna y fue directamente a sentarse a la mesa asignada a "La peña de Morfi".

Sorpresivamente, todos los ex compañeros del mediático, se levantaron de sus sillas abandonando el lugar, dejando sola a Jésica Cirio. Minutos después volvió el cocinero Rodrigo Gascón que decidió acompañar a la modelo.

Jey decidió arribar al lugar luego de el programa que lo tuvo como conductor perdiera en su categoría frente a otros programas.

Después de permanecer un rato sentado, Mammon recorrió el salón, saludó a algunos famosos y hasta se tomó una foto con Susana Giménez, a quien le agradeció su apoyo en las declaraciones de la semana pasada.

En declaraciones a La Nación, el también humorista dijo: “Yo había dicho que podía pasar que a último momento decidiera no venir, pero vine... Este es un lugar energéticamente difícil para enfrentar, por lo tanto dudé todo el tiempo sobre qué hacer, pero acá estoy”, dijo Jey.

Luego sumó: “No me arrepiento en absoluto de haber venido, estoy muy contento de estar con un equipo con el que compartí todo un año un programa maravilloso, ocupando un lugar que había dejado nada más y nada menos que Gerardo Rozín y que me tocó llenar cuando él se fue de este mundo, lo que fue un desafío enorme. Por eso me pareció que tenía que estar acá".