El actor Gene Hackman y su esposa fueron hallados sin vida
Todo ocurrió en la casa que la pareja tiene en Nuevo México. Se investigan las causas de los fallecimientos.
El legendario actor estadounidense Gene Hackman de 95 años, fue hallado muerto junto a su esposa, la pianista Betsy Arakawa, de 63, en su residencia de Santa Fe, Nuevo México.
La policía local confirmó el fallecimiento de la pareja y el de su perro, sin proporcionar detalles sobre las circunstancias del deceso del ganador de dos premios Óscar y considerado uno de los intérpretes más versátiles y respetados de Hollywood.
Nacido en San Bernardino, California, durante la Gran Depresión y criado en Danville, Illinois, su infancia estuvo marcada por la adversidad. A los 13 años, su padre abandonó a la familia y, años después, su madre falleció en un incendio antes de que él alcanzara la fama. A los 16 años, se alistó en la Marina de Estados Unidos tras mentir sobre su edad, una experiencia que describió como desafiante pero fundamental en su vida.
El reconocimiento le llegó con su interpretación del detective Jimmy “Popeye” Doyle en The French Connection (1971), papel que le valió su primer Óscar como mejor actor. La cinta, dirigida por William Friedkin, es recordada por su emblemática persecución en automóvil por las calles de Nueva York. Dos décadas después, Hackman obtuvo un segundo premio de la Academia, esta vez como mejor actor de reparto, por su interpretación del despiadado sheriff “Little Bill” Daggett en Unforgiven (1992), dirigida por Clint Eastwood.
Con una carrera de más de cinco décadas, Hackman participó en más de 80 películas y recibió cuatro nominaciones adicionales a los Óscar. Su talento fue reconocido por cineastas como Alan Parker, quien aseguró que Hackman estaba en la lista de actores con los que cualquier director soñaba trabajar. Entre sus roles más memorables destacan el experto en vigilancia Harry Caul en The Conversation (1974), el ex alguacil en Mississippi Burning (1988) y el excéntrico patriarca Royal Tenenbaum en The Royal Tenenbaums (2001), por el que ganó un Globo de Oro.
Lejos de buscar el estrellato, Hackman priorizó la calidad de sus interpretaciones sobre la fama. “Fui entrenado para ser actor, no una estrella”, declaró en una ocasión. Su estilo natural y su capacidad para encarnar personajes comunes con profundidad lo convirtieron en un referente del cine estadounidense. Pese a su éxito, evitaba ver sus propias películas. “Me cuesta mucho emocionalmente verme en la pantalla”, confesó en una entrevista.
En 2008, Hackman anunció su retiro del cine para dedicarse a la escritura y la pintura, llevando una vida tranquila en Santa Fe, alejado de los reflectores. Su legado en la industria cinematográfica perdurará como testimonio de su talento y dedicación a la actuación.