En la noche del martes en “MasterChef Celebrity” (Telefé) los participantes tuvieron algunos problemas en el nuevo desafío que presentó el certamen de cocina y una de las más perjudicadas fue Andrea Rincón.

Un poco molestos por la calidad y la presentación de los platos, Martitegui, De Santis y Betular se cansaron de lo que llamaron “el jardín de infantes” y confirmaron que comenzarán a ser más estrictos con las devoluciones.

La prueba de la noche evaluaba las aptitudes de liderazgo y compañerismo entre los participantes del certamen y en la selección de los capitanes resultaron elegidas Cande Vetrano, ganadora de una medalla de plata, que eligió a María O’Donnell como la capitana contrincante.

A partir de ahí cada líder debió elegir a tres cocineros para llevar a cabo las preparaciones con la dificultad de que las recetas no podías ser vistas por el equipo, sino que la capitana dirigía las preparaciones.

O’Donnell eligió a Andrea Rincón para la entrada, Cae para el plato principal y a Fernando Carlos para el postre. Por su parte Andrea Rincón tuvo problemas con un plato a base de hinojos, morcilla, manzana y cebolla que no tuvo las suficientes indicaciones.

En medio de la incertidumbre Rincón gritó a la reconocida periodista que se suponía, debía dirigirla: “¡María! ¡María! Hace media hora que te estoy llamando…Cuando te pido las directivas, me las pasás todas mal”.

Luego la ex del Mono de Kapanga se quejó con Santiago del Moro, cuando el conductor le preguntó sobre su plato: “Mal, si no me dijeron nada y ahora quieren que haga todo junto”. Inmediatamente O’Donnell exclamó: “Ella tiene muchas cosas, quizás ahí estuvo un error mío, en haber elegido a Andrea para ese plato”.

Finalmente Germán Martitegui no tuvo piedad al calificar la preparación de Rincón quien dijo: “Claramente el cortocircuito que hubo en su relación está expresado en el plato”, comenzó diciendo, luego agregó: “La relación entre el chutney y la morcilla es ridícula, porque hay cinco veces más chutney que morcilla”, comentó.

La actriz no se quedó callada e interrumpió al jurado: “No seas tan duro, un poquito de amor”, pidió y sumó: “Siempre mis platos son una porquería. Nunca me vinieron a decir que algo está rico”, se quejó en una noche de pocos amigos para la ex Gran Hermano.