Este miércoles, Gustavo Daniel Fullana, el empleado de un conocido medio local se sometió a una audiencia de Flagrancia, tras protagonizar una inesperada situación el domingo. Al trabajador, al que le encontraron cocaína en el auto e intentó coimear a policías, le otorgaron una probatión por el plazo de 2 años, por el delito de cohecho (soborno), según informaron fuentes judiciales.

Cohecho (soborno)

 Además de ser beneficiado con la suspensión de juicio a prueba, el imputado deberá afrontar una reparación simbólica de $50.000 a favor de merenderos a pagar en 3 cuotas, tendrá que trabajar 200 horas en la Municipalidad de la Capital por el plazo de 1 años en trabajos no remunerativo y tiene la obligación de realizar un taller de capacitación sobre ética y responsabilidad ciudadana.

El hecho:

Una situación inesperada y realmente comprometedora se registró durante el pasado domingo 12 de noviembre. Se trata de que un periodista local fue interceptado por las autoridades por circular a altas velocidades y para zafar quiso coimear policías. Los uniformados no sólo lo detuvieron por esta situación, sino que revisaron sus pertenencias y le encontraron cocaína.

Todo se dio en los alrededores de la intersección de Diagonal Viamonte y Avenida Paula Albarracín de Sarmiento. Por este lugar efectivos policiales detectaron a una persona conduciendo a una velocidad que superaba el máximo permitido. Ante esta situación quisieron acercarse a este sujeto para entrevistarlo, pero se reaccionó dándose a la fuga.

Luego de algunos minutos este vehículo fue interceptado por las autoridades. Allí finalmente los agentes pudieron dialogar con este conductor temerario. Este hombre de 50 años de edad manifestó ser periodista de un diario sanjuanino y que el rodado era propiedad del medio de comunicación para el que trabajaba, por lo que no contaba con la documentación requerida.

Seguidamente, como parte del protocolo, se le realizó un palpado de urgencia descubriendo que entre sus pertenencias tenía dos envoltorios. Los mismos contenían un polvo de color blanco que parecía ser una sustancia ilícita, por lo que se convocó a personal de Drogas Ilegales. En ese contexto el conductor le ofreció dinero a los efectivos presentes para que lo dejaran ir. Los policías no recibieron el soborno y simplemente procedieron a detenerlo.

Al poco tiempo se hicieron presentes los especialistas en sustancias ilegales, los cuáles realizaron la prueba de campo, confirmando que efectivamente se trataba de cocaína. Todo terminó con el sujeto quedando a disposición de Flagrancia por el delito de Cohecho (soborno), y de la Secretaría Penal N°5 del Juzgado Federal N°2 al poseer estupefacientes. Sumado a esto, el Chevrolet Aveo fue secuestrado ya que no contaba con un seguro ni tenía la RTO.