En San Juan, más de 30 personas han sido víctimas de una nueva modalidad de estafa informática, utilizando el nombre de la distribuidora de gas ECOGAS para ofrecer falsos beneficios. El fiscal Pablo Martín, coordinador de la UFI Delitos Informáticos, advirtió en Cien por Hora sobre esta creciente maniobra delictiva. 

De este modo, Martín explicó cómo los delincuentes logran engañar a los usuarios, haciéndose pasar por representantes de ECOGAS a través de publicaciones falsas en redes sociales como Facebook. "Aprovechan los meses de invierno y el uso de la distribuidora de gas para ofrecer descuentos del 40% o 50% mediante enlaces a WhatsApp. Una vez que la persona contacta con ellos, comienza la estafa," explicó el fiscal.

El engaño sigue un patrón conocido como "phishing", donde los estafadores solicitan información sensible, como códigos de validación de WhatsApp. Según Martín, una vez que las víctimas proporcionan estos códigos, los delincuentes acceden a las cuentas de WhatsApp de las personas y las controlan remotamente mediante aplicaciones de acceso remoto, lo que les permite ingresar a cuentas bancarias, solicitar préstamos y realizar transferencias.

Es importante que las personas activen la verificación en dos pasos en WhatsApp para proteger sus cuentas”, indicó. Luego sumó: “Muchas víctimas sin esta protección entregaron el control de sus cuentas a los estafadores, quienes luego acceden a sus cuentas bancarias y extraen dinero de manera rápida, moviéndolo a través de un circuito financiero que incluye cuentas bancarias y criptoactivos”.

La investigación avanzaron con la identificación de un grupo delictivo que opera desde la provincia de Córdoba. “Gracias a las antenas de comunicación, logramos rastrear las operaciones y determinar que estas personas están ubicadas en Córdoba”, indicó. "Ya estamos en contacto con la policía y fiscales de la provincia para coordinar los allanamientos, secuestro de dispositivos y detención de los responsables", afirmó Martín.

Sin embargo, el fiscal señaló que la recuperación del dinero es una tarea complicada debido a la rapidez con la que se mueve el dinero en el sistema bancario. “Si la denuncia no se realiza de inmediato, el dinero se transfiere a cuentas receptoras y luego se mueve por el circuito financiero hasta terminar en cuentas relacionadas con criptoactivos”, dijo. Por lo que añadió que “Esto dificulta el rastreo completo del dinero”.

El fiscal Pablo Martín hizo hincapié en la necesidad de que los damnificados denuncien tanto ante las autoridades como ante sus bancos para aumentar las posibilidades de recuperar el dinero o, al menos, evitar que las deudas generadas por los estafadores se carguen a las víctimas. "Hemos recibido unas 30 denuncias, pero solo 15 personas se han acercado a sus bancos para hacer el reclamo. Es crucial que todos los damnificados se presenten ante su entidad bancaria", enfatizó.

El Banco Nación, que es una de las entidades donde se registraron la mayor parte de los casos,  y se han  comprometido para ayudar a las víctimas, anulando los préstamos solicitados fraudulentamente. "El banco no les hace pagar esos préstamos y les da de baja. Sin embargo, en los casos en que se ha perdido dinero de la cuenta, la recuperación es más compleja y puede requerir un reclamo civil", explicó el fiscal.

Martín también alertó sobre otros tipos de estafas similares que utilizan falsas promociones de empresas o inversiones en criptoactivos. “Es fundamental que la gente desconfíe de los descuentos extraordinarios o de las promesas de rendimientos imposibles”, aludió. "Siempre hay algo sospechoso cuando las promociones suenan demasiado buenas para ser verdad", concluyó.