Este miércoles, se llevó a cabo una nueva audiencia contra el Jonathan Manuel Torres, acusado de golpear y dejar al borde de la muerte a su pareja Gisela Falcón, en Caucete. La fiscal Daniela Pringles relató cómo se sucedieron los hechos, según la investigación realizada por la UFI de Delitos Especiales, en la cual quedó a la vista las contradicciones de la familia del imputado.

"Esta pelea, esta discusión, fue presenciada por la hermana del imputado. En este momento, en plena discusión, el imputado le dio un golpe a su pareja en la cabeza golpeando su costado izquierdo. Automáticamente presentó sangrado, otorraquia en sus oídos, quedando tendida en el suelo. Un menor se despertó por los gritos y al llegar a la cocina, corrió a buscar a su madre", contó Pringles. 

Y agregó: "La madre del imputado ingresó a la casa, buscó papel para auxiliar los oídos de la víctima y le limpió la sangre. Sin embargo, a partir de ese momento, la señora no hizo nada, ni ella, ni el imputado, para asistir a la víctima. La hermana, frente a la situación, confundida, llamó a su pareja que maneja una especie de remís trucho. Frente a esta situación, se llevaron a la víctima".

"Tomaron la decisión, luego de transcurrido un tiempo excesivo, de subir a la víctima al vehículo y la trasladaron, primeramente, al hospital de Caucete y luego al hospital Rawson donde inmediatamente tomaron conocimiento de la gravedad de la situación. En esa instancia, personal policial y médicos del hospital, no tenían conocimiento de cómo había sido el hecho", se explayó.

Pringles añadió: "El señor Torres había planeado una historia distinta a la ocurrida. Dijo que la encontraron descompensada en el suelo, sin poder explicar los motivos. Una vez que ingresó, la señora fue operada de urgencia por presentar hemorragia traumática y le encontraron un hematoma. A la fecha, permanece en terapia intensiva, inducida a coma farmacológico, con pronóstico reservado".