Gustavo Márquez, padre de Francisco Márquez, el joven fallecido en un accidente vial en la Ruta del Sol, protagonizó una protesta contundente este jueves en los tribunales de la provincia, reclamando justicia tras la sentencia que dejó en libertad al responsable del siniestro. Visiblemente afectado, Gustavo se presentó con una piedra atada a su tobillo, como símbolo del peso del dolor y la impotencia que siente ante la resolución judicial.  

Francisco Márquez perdió la vida luego de ser embestido desde atrás por un vehículo mientras circulaba en moto. Según se denunció, el conductor que lo impactó, Gonzalo Nicolás Castro Salinas, corría picadas en ese momento. Sin embargo, aunque el juicio avanzó, la condena impuesta no fue de cumplimiento efectivo, lo que generó profunda indignación en la familia de la víctima.  

"Es una vergüenza la justicia. A nosotros, los padres, nos encadenan, y a los asesinos los liberan", expresó Gustavo Márquez con voz entrecortada. "Esa piedra representa que estamos atados a un sistema que no hace justicia". Según explicó, esta protesta busca visibilizar no solo su caso, sino el sufrimiento de muchos padres que enfrentan situaciones similares.  

Márquez cuestionó duramente la decisión de la jueza a cargo del caso, quien, en lugar de convocar a una audiencia, emitió su resolución por escrito, aprobando un juicio abreviado: "La jueza Lallea aceptó liberar a Castro Salinas, después de cuatro jueces que pasaron por el caso. Esto no es justicia. Mi esposa tiene que ir al cementerio el domingo a ver a nuestro hijo, ¿y quién nos devuelve la paz?", se lamentó.  

Gustavo no escatimó críticas hacia el sistema judicial local, al que acusó de ser un "casino" donde se hacen "apuestas, pero no justicia". Denunció que los jueces y fiscales desestimaron pruebas clave, como las imágenes de las cámaras de vigilancia del Centro de Monitoreo CISEM 911, lo que para él demuestra una falta de voluntad para avanzar con el caso.  

También mencionó al fiscal Renato Roca, quien estuvo involucrado en el proceso y ahora es juez, sugiriendo que podría haber intereses detrás de la falta de acción en la investigación: "Quizás llegó a juez por no querer recaudar pruebas", insinuó Márquez.  

A pesar de la frustración, Márquez dejó en claro que no busca venganza, sino un proceso judicial justo: "Yo no quiero que lo condenen ahora. Solo quiero un juicio, como debe ser". Agregó que su protesta continuará hasta recibir respuestas: "Me quedaré acá todo el tiempo que sea necesario, porque esto no es justicia. Esto es un clan que cuida sus propios intereses".  

Gustavo Márquez cerró su declaración con un mensaje que refleja el sentir de muchas familias en situaciones similares: "No quiero apostar si va o no a la cárcel. Quiero justicia para mi hijo".

La familia de la víctima exige que el proceso se lleve adelante con transparencia y justicia, mientras denuncian lo que consideran irregularidades en la investigación y el tratamiento del caso.