Este jueves, el empresario textil Sergio Vallejo Mini, propietario de la firma Zonda Safety Gear, fue juzgado en Flagrancia, por “violación a las medidas ordenadas para impedir la propagación de una epidemia y desobediencia a la autoridad, en concurso ideal (arts. 205, 239 y 54 del Código Penal)”.

El pasado martes 14 de abril, la policía clausuró el taller textil del empresario, al encontrarlo en funcionamiento, pese a las medidas de aislamiento social que rigen en todo el país por el coronavirus.

En el lugar, ubicado en Lateral Este de Ruta 40, entre Maurín y Quiroz, en el departamento de Rawson, había más de 30 personas cumpliendo tareas de confección textil a las que se dedica la empresa, según pudo comprobar el móvil de Canal 13.

En esa oportunidad, Vallejo, habló con Canal 13 y aseguró que la actividad de este taller se encuentra exceptuada. Según el decreto presidencial DNU 297-2020. "El decreto nos habilita a trabajar por ser fabricantes de elementos de seguridad como barbijos, mamelucos, para el sector de la sanidad, la policía, las municipalidades, el sector público", dijo.

El empresario y la justicia, no llegaron a un acuerdo, por lo que la causa fue elevada a juicio. El juez, Eduardo Raed, dio detalles sobre la audiencia. “Las partes no arribaron a ninguna de las soluciones alternativas, como condena en suspenso, absolución, etc., que prevé el Código Penal, se da por fracasada y se pasa el caso a juicio”, dijo.

La defensa del propietario del taller textil, insistió en que el empresario no violó la cuarentena y aseguró que la actividad de este taller se encuentra exceptuada del decreto emitido por el Gobierno Nacional que prohíbe la circulación y actividades en espacios cerrados en el marco de la pandemia mundial.  

Sin embargo, para el fiscal del caso, Ignacio Achem, el hombre incumplió con las medidas dispuestas en los artículos 205 y 239 del Código Penal. La audiencia de finalización de juicio será el próximo 24 de abril a las 8.30, informó el juez Eduardo Raed.

En cuanto al empresario, quedará en prisión preventiva con arresto domiciliario hasta la fecha del juicio.

Este jueves, fueron juzgados otros dos empresarios del rubro textil por el mismo delito violar la cuarentena y abrir sus talleres, donde hacían trabajar a varios empleados. Se trata de Isaias Brant, quien fue condenado a  la pena de 8 meses de prisión de cumplimiento condicional, más $10000 en costas y $40000 de donación al Hospital Rawson. 

Por su parte, Jorge Fabián Zuckerman, supervisor de la firma Soberano, fue condenado a 8 meses de prisión de cumplimiento condicional, trabajo comunitario por 2 meses en Municipalidad de Rawson y reparación simbólica de $ 50000, y remisión a la justicia ordinaria por Soberman.