Mario Ariel Gómez (37) es el único sospechoso implicado hasta el momento por el brutal asesinato de Francisco Martínez, el verdulero de 70 años que fue asaltado y masacrado a golpes el pasado 26 de diciembre en su casa ubicada en calle Centenario, Chimbas. El 8 de enero, el sospechoso fue indagado por el delito de homicidio en el Cuarto Juzgado de Instrucción y se abstuvo de dar su versión por recomendación de su defensa.

De todos modos, para el juez Martín Heredia Zaldo encontró pruebas suficientes como para ordenar que Gómez sea enviado al Penal de Chimbas, precisaron fuentes judiciales. Hasta ahora las pruebas que complican al vecino de la víctima son los testimonios de testigos que lo vieron la noche del crimen en tres ocasiones distintas en la vivienda del verdulero, según informó Telesol.

Otra pericia que esperan los pesquisas es sobre unas manchas que hallaron en unas prendas del sospechoso. Los investigadores están convencidos de que son de sangre y que pertenecen a la víctima, pero por ahora esperarán el resultado final de las pruebas forenses. Esa evidencia sería clave y perjudicaría bastante la situación procesal de Gómez, dado que lo situaría en la escena del crimen, revelaron fuentes del caso.

Otro cabo suelto en la investigación es que aún no aparece el arma con la que ultimaron a Martínez. Sería un palo de gran tamaño (similar a las trabas de parral), dado que en la escena hallaron astillas. Tampoco esos 200.000 pesos que faltaban de la vivienda del verdulero. Es por eso que los pesquisas son cautelosos y no descartan la participación de otra persona en la maniobra.