Niño abusado: confirman que el menor es inimputable y que la familia dejó el barrio
Finalmente se constató que el adolescente denunciado tiene 15 años por lo que no responderá penalmente ante sus actos. Esto fue informado por el juez encargado del caso, Jorge Toro.
Esta semana terminó de confirmarse que el adolescente que esta acusado de haber abusado sexualmente a un niño de 3 años, es inimputable. Esto tiene que ver con que finalmente tiene 15 años y no 16 como se creía. Debido a esto, se tomaron una serie de medidas como aplicar una prohibición de acercamiento a la víctima, por la que toda la familia del imputado se fue del barrio.
Jorge Toro, juez encargado del caso, reveló que la investigación dio un giro inesperado cuando le pidieron una partida de nacimiento actualizada al familia del imputado. En ese momento descubrieron que el chico tiene 15 y no 16 años de edad como manifestaron los denunciantes cuando realizaron la presentación oficial.
"Las primeras medidas que se tomaron fue una evaluación psicológica del denunciado y también una evaluación social de él y su familia. En ese marco verificamos que no tenía 16 años como indicaba el sumario sino que tenía 15 años. Esto hace que a un menor que se le imputa un delito y no cumplió 16 años, no responda penalmente y la declaración de él no corresponde indagarla sino que se toma una declaración informativa y después se toman una serie de medidas de protección a la víctima", expresó.
Si bien no habrá una condena para este joven, Toro aclaró que se tomarán una serie de medidas contra el agresor para proteger al niño afectado. Entre ellas se encuentra una orden de alejamiento respecto de la víctima, por lo que no sólo el chico sino toda su familia decidió irse del Conjunto 13 para cumplir con ese mandato.
"Se dicta una prohibición de acercamiento para que el agresor y su familia no puedan tener contacto ni con el ofendido ni con la familia de él. Se han dispuesto medidas al agresor que tienen que ver con que continúe con un proceso de escolarización y que realice un taller para agresores sexuales. Lo que normalmente se hace es que con alguna estrategia al chico que se le imputa la comisión de un hecho sea trasladado fuera del ámbito de residencia habitual para evitar el contacto con la víctima. En este caso toda la familia, no sólo el agresor, ha salido del barrio para garantizar el cumplimiento de esta medida", manifestó.
Finalmente el magistrado aseguró que si bien no tiene el mismo peso que una condena habitual, si el personal de Niñez se encargará de realizar un seguimiento. El objetivo es ver si el adolescente cumple con su escolarización y con el taller para abusadores sexuales que se le indicó realizar.
"Son medidas que tienen un fuerte contenido de restitución de derechos y que se le impone un seguimiento. Se le solicita a la Dirección de Niñez que acompañe e informe al Juzgado si estas medidas se van cumpliendo, pero no tienen las características obviamente de las denominadas medidas socioeducativas que si son como medidas que prevé el sistema penal que son de carácter más compulsivo", sentenció.