El pasado miércoles salió a la luz un presunto caso de abuso sexual en perjuicio de una niña. Lo que hace aún más aberrante estas supuestas violaciones, es que la menor aseguró que quienes la sometían eran su propio padre y su tío. La pequeña le contó todo a su madre quien radicó la denuncia, lo que derivó en la detención de ambos acusados durante el miércoles.

Todo comenzó el 26 de julio cuando la madre de la niña radicó una denuncia en la UFI del ANIVI. Horas antes de realizarla la mujer se sorprendió ya que su hija le pidió que la pasara a buscar lo más rápido posible cuando estaba en casa de su abuela. En un primer momento la chica no contó nada pero al otro día se soltó y contó parte de lo que había vivido.

Por la noche su padre se había metido a su cama y había comenzado a manosearla. Ante esta situación ella se fue a dormir con su abuela pero ahí apareció su tío que la llevó a la cocina con la excusa de mostrarle algo. Sin embargo cuando fue su tío también empezó a tocarle sus partes íntimas.

En un principio esto fue todo lo que contó antes de que su madre denunciara. No obstante la menor seguía actuando de forma extraña y su mamá no la veía bien. Finalmente con el paso de los días fue contando toda la verdad del asunto. Ella reveló que esta no era la primera vez que sucedía.

Directamente la víctima aseguró que los ultrajes se producían cada vez que ella iba a la casa de su abuela en Santa Lucía. Sumado a esto reveló que debió soportar este tipo de abusos desde que tiene 7 años de edad, lo que quiere decir que la violaron desde hace más de cuatro años.

A raíz de este nuevo testimonio su progenitora acudió a ampliar la denuncia el pasado jueves 5 de agosto. En dicha jornada se dio la casualidad de que la maestra de la niña y la directora de la escuela fueron al Centro ANIVI. Ellas habían ido a denunciar que la alumna había contado que fue abusada sexualmente por su papá.

Frente a este conjunto de testimonios y presentaciones se estableció al pasado miércoles 11 de agosto como la fecha para la audiencia de formalización. Esto efectivamente sucedió y los dos acusados se sentaron en el banquillo frente al juez de Garantías, Andrés Abelín Cottonaro. Allí los fiscales Valentina Bucciarelli y Nahuel Ibaceta pidieron la prisión preventiva.

Abelín hizo lugar a esta solicitud por lo que estos dos sujetos pasarán al menos cuatro meses en el Penal de Chimbas. Sumado a esto se otorgó un año de tiempo para la investigación de este presunto abuso sexual gravemente ultrajante. Por cuestiones de protección de la menor no se revelaron las identidades. Sin embargo se sabe que el padre es un hombre metalúrgico de 41 años de edad y el tío es un joven de 21 años que se dedica a la panadería.