En la audiencia de juicio abreviado realizada este lunes 9 de diciembre, Federico Maximiliano Peters fue condenado a tres años de prisión en suspenso por los delitos de distribución y tenencia de material de abuso y explotación sexual infantil. El fallo fue emitido por la jueza Mabel Moya tras aceptar el acuerdo propuesto entre el Ministerio Público Fiscal y la defensa del imputado.

El caso comenzó gracias a informes proporcionados por la Unidad Fiscal Especializada en Delitos Informáticos, en colaboración con la red internacional CyberTipline del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC). Según los reportes, la empresa Meta (Facebook) detectó múltiples cuentas vinculadas al imputado, desde las cuales se compartieron videos e imágenes de abuso sexual infantil.

Entre los materiales identificados, se incluyen al menos diez videos explícitos clasificados como "B1", que involucran a víctimas púberes mayores de 13 años. Los reportes detallan que los contenidos fueron enviados a usuarios de San Juan, utilizando direcciones IP registradas en la localidad de Media Agua, departamento Sarmiento.

De acuerdo con la investigación, Peters utilizaba diversas cuentas en redes sociales bajo nombres ficticios y fotografías de terceros para desviar sospechas. Además, se vinculó a dispositivos móviles registrados a nombre de un familiar. Durante el allanamiento en su domicilio, ubicado en Media Agua, se incautó un teléfono celular Motorola Moto E7i Power, que el imputado tenía en su poder al momento del procedimiento.

Tras evaluar las pruebas recopiladas, la jueza Moya declaró a Peters culpable de los delitos contemplados en el artículo 128 del Código Penal, que sanciona la distribución y tenencia de material de abuso sexual infantil. Como parte del acuerdo, se impuso una condena de tres años de prisión condicional, además del cumplimiento de reglas de conducta, como la fijación de domicilio y la supervisión del Patronato de Liberados.