La nueva cepa de coronavirus, cuyo hallazgo fue confirmado hace menos de una semana por el Reino Unido, y se propaga con más rapidez y podría ser hasta 70% más contagiosa. No obstante, los primeros estudios reflejaron que no hay evidencia de que esa variedad provoque síntomas más graves, aumente la letalidad de la enfermedad ni reduzca la respuesta de los anticuerpos ni la eficacia de las vacunas.

 Desde el fin de semana pasado, numerosos países suspendieron los vuelos procedentes del Reino Unido y Sudáfrica, y otros reforzaron los protocolos sanitarios para las personas que lleguen desde esos países, con el fin de evitar la propagación del coronavirus.

Fuente: EFE