El sujeto se hacía pasar por un adolescente famoso en las redes sociales. De ese modo se hacía hacerse amigo de las niñas y procedía a pedirles realizar actos sexuales frente a la cámara. Esto fue informado por la Policía Federal Australiana en un comunicado.


Una niña de 13 años avisó a la Policía en Estados Unidos que otro niño, que ella creía de 15, le estaba haciendo preguntas sexualmente explícitas. La pequeña también agregó que falsificaba conversaciones para amenazarla con enviar las imágenes a su familia y amigos si no le proporcionaba fotos de desnudos y aceptaba a hacer los actos sexuales que le pedía.

Los efectivos confiscaron un teléfono móvil, discos duros de ordenador y un USB de la casa del acusado. En los dispositivos se lograron encontrar más de 2.000 imágenes de niñas.

Ahora el acosador enfrenta 113 cargos que incluyen 50 por utilizar un servicio de transporte para amenazar, acosar o causar un delito; 26 por obligar a una persona a tener un comportamiento sexual y 17 por solicitar material de explotación infantil.