Durante la madrugada de este martes penitenciarios encontraron sin vida a un reo que estaba recluido en el Pabellón 1 de varones en el Penal de Chimbas. Se trata de un joven de 22 años de edad que había sido entregado a las autoridades por su propia madre hace algunos meses.

El difunto es Ceferino Vega Arroyo quien el martes 27 de febrero de este año cometió el ilícito que derivó en su detención. Sobre las 18:30 de ese día un hombre iba caminando por calle Doctor Ortega de oeste a este y al llegar a calle 25 de Mayo, más precisamente en el ingreso al Barrio Victorino Ortega, dos sujetos lo tomaron por sorpresa.

Uno de ellos lo tomó del cuello, ocasionando que se cayera al suelo mientras el otro ladrón le propinaba un golpe de puño en el ojo izquierdo lo que ocasionó que su celular cayera. Esto fue aprovechado por uno de los malvivientes que tomó el smartphone, para que luego tanto él como su cómplice corrieran en dirección al barrio Victorino Ortega.

Por este motivo efectivos policiales se involucraron, los cuáles vivieron algo inesperado. Cuando hacían recorridas una mujer comenzó a llamarlos y cuando se acercaron les dijo: 'Vengan entren, este niño me tiene cansada, acaba de entrar corriendo con un celular'. Ella era la madre de Arroyo, quien les permitió el ingreso a los uniformados para que detuvieran a su hijo.

Finalmente este sujeto fue encontrado condenado a cumplir con una pena efectiva y por ese motivo estaba privado de su libertad en un calabozo del Penal de Chimbas. Si bien dentro de un año ese castigo finalizaba, este martes lo encontraron sin signos vitales, algo que tratan de esclarecer los especialistas de Criminalística y de la UFI Delitos Especiales están trabajando para tratar de descubrir qué fue lo que ocurrió dentro de esa celda.