Una familia sanjuanina vivió una situación sumamente preocupante durante el pasado miércoles 7 de septiembre. Esto se debe a que un niño llegó a ingerir desengrasante y soda cáustica en un descuido de quienes lo estaban cuidando. Ante esta situación fue ingresado en un hospital donde quedó internado.

El afectado es un pequeño de apenas 5 años de edad, el cuál lamentablemente consumió estas dos sustancias. Ambos productos pueden provocar diversas quemaduras en los labios, vías respiratorias, tracto gastrointestinal y prácticamente en cualquier tejido interno que llegue a tocar.

Cuando su madre, una mujer de 25 años de edad, se dio cuenta de lo que había sucedido rápidamente llamó a Emergencias para pedir ayuda. Ante este contacto una ambulancia llegó al lugar donde se encontraba el menor de edad para trasladarlo junto a su mamá hasta el Servicio de Urgencias del hospital Rawson.

Allí el infante fue ingresado, asistido y por decisión de los profesionales de la salud quedó internado en el nosocomio para que puedan controlar su evolución con el paso de las horas.