Carlos ‘Tati’ Brizuela, un albañil sanjuanino de 33 años, había viajado a Buenos Aires en busca de una oportunidad laboral. Tras perder su empleo en San Juan, decidió probar suerte pero su tuvo un desenlace fatal e inesperado.

El pasado 21 de marzo, Brizuela partió de su provincia natal y, a los pocos días, logró conseguir un empleo. Durante su estadía en Buenos Aires, conoció a un grupo de personas en una parrillada, quienes le ofrecieron una oportunidad de trabajo. Para entrevistarse con su posible empleador, subió como acompañante a una moto sin casco. Sin embargo, en el trayecto de regreso, el conductor del rodado perdió el control y Brizuela salió despedido, impactando contra una camioneta.

El accidente ocurrió en una zona donde, según la fiscalía, las señales de tránsito eran confusas debido a obras viales. De acuerdo con el testimonio de su hermana, María Brizuela, una maniobra imprevista de una camioneta habría desestabilizado la moto en la que viajaba su hermano. La caída y el impacto fueron devastadores.

“Mi hermano nunca despertó. Estuvo internado en el hospital Mariano y Luciano de la Vega, en Moreno. Me avisaron el domingo a la mañana y desde el lunes estoy aquí en Moreno. Los médicos nos dijeron que tenía muerte cerebral y finalmente falleció hoy miércoles a la mañana tras sufrir tres paros cardiorrespiratorios”, relató María en diálogo con Diario de Cuyo.

La familia de Brizuela enfrenta ahora una situación desesperante. El albañil dejó a su padre de 70 años y a cuatro hijos en San Juan, quienes esperan poder darle el último adiós. La madre de tres de los cuatro niños viajó a Buenos Aires tras conocer la noticia, pero tuvo que regresar a la provincia ante la dura realidad que ahora deben afrontar.

“A nosotros no nos avisó que se iba. Vivía con mi papá y otros hermanos en Centenario y Ruta 40. No llegaba con los gastos, así que se fue a Buenos Aires para buscar trabajo, una mejor vida. Pero el destino... estoy helada”, confesó su hermana entre lágrimas.

A la tragedia se suma el alto costo del traslado del cuerpo a San Juan, que según la familia asciende a aproximadamente dos millones de pesos. “No podemos afrontarlo”, aseguró María, quien indicó que están recibiendo asesoramiento y deben esperar la autopsia del cuerpo antes de proceder con el traslado.