Uñac y Orrego, al rescate de Massa y Bullrich por instinto de preservación
Lo primero será salvar la patria chica. Después habrá tiempo para evaluar el resultado nacional. Obtener un buen número en la provincia sería suficiente, aunque hubiera derrota en el resto del país.
No es que a Sergio Uñac le resulte indiferente el resultado nacional. Por supuesto le interesa que Sergio Massa quede al menos en segundo lugar y gane su pase al ballotage con Javier Milei. Pero desde una perspectiva un tanto mezquina y mucho más pragmática, le serviría que el ministro de Economía quede entre los dos primeros en San Juan, aunque le fuera pésimo en el resto del país.
Si Massa terminara segundo en San Juan, ese resultado habrá facilitado que Uñac entre al Senado. Misión cumplida. Si Massa quedara primero, sería gol de media cancha. Inesperadamente el peronismo sanjuanino podría retener las dos bancas que liberan Rubén Uñac y Cristina López Valverde. Es un escenario muy optimista, teniendo en cuenta el resultado ajustado del 13 de agosto.
El foco estará puesto entonces no tanto en el guarismo de Massa a nivel país sino aquí, en este modesto padrón donde el peronismo terminó jugando el juego de la silla: de repente la música se detendrá y uno se quedará afuera. Es lo que sucederá al momento de repartir las bancas en el Senado.
El que quede tercero, aunque la diferencia de votos sea ínfima con el primero y el segundo, será excluido de la Cámara Alta. Son las reglas. Por lo tanto, el rendimiento del candidato presidencial será determinante para el arrastre de las figuras provinciales. Uñac tiene una dependencia absoluta de Massa aquí en su propia provincia.
Por eso viajó a Buenos Aires el pasado martes y volvió a tomarse una foto con el candidato presidencial de Unión por la Patria. Quedan dos semanas exactas de campaña antes de entrar en veda. La máxima aspiración del gobernador es que el ministro de Economía venga una vez más, para fortalecer el voto sanjuanino, el que cuenta a la hora de asignar los escaños en el Senado.
Un razonamiento semejante al de Uñac le cabe a Marcelo Orrego. Doblemente en su caso en particular, porque tendrá que tomar las riendas de la provincia el próximo 10 de diciembre. Al gobernador electo le resultaría óptimo que Patricia Bullrich lograra polarizar con Milei y desplacen entre ambos a Massa de la disputa por el sillón de Alberto Fernández.
Pero si esto no fuera posible, si Pato fuera eliminada este 22 de octubre en el tanteador nacional, a Marcelo le serviría generar un microclima sanjuanino. Con que ella quede segunda en este pequeñísimo distrito electoral sería suficiente para salvar la elección. Es decir, para garantizar que entre Emilio Achem al Senado.
Orrego asumirá con un micro-bloque oficialista en la Legislatura, equivalente a un tercio del cuerpo. Tendrá apenas cuatro intendentes de su propio color partidario. No contar con al menos un senador lo dejaría muy limitado a la hora de negociar políticamente con el próximo presidente de la Nación. Quien nada tiene para ofrecer en el Congreso, nada puede pedir a cambio.
Por todo esto Orrego necesita que Bullrich repunte mucho en San Juan. En esta provincia la 'halcona' perdió la interna frente a Horacio Rodríguez Larreta, gracias a la intervención de Marcelo. Ahora el gobernador electo debe trasladar toda su artillería para posicionar a Patricia.
Vale la reiteración: pase lo que pase en el escrutinio nacional, Orrego podría salvar el día si lograra que Pato quede al menos en segundo puesto aquí en San Juan. Será suficiente para abrochar la senaduría que hoy puede ser para cualquiera.
La paridad del 13 de agosto sigue firme, según dijo el consultor Antonio De Tommaso el pasado martes en 'Paren las Rotativas'.
'Hasta aquí se está calcando lo que pasó en la PASO. No se visualizan cortes', sostuvo el encuestador. El tema del corte de boleta es central, porque tanto Uñac como Orrego vienen de participar de internas muy picantes. El peronismo todavía tiene heridas sangrantes. Juntos por el Cambio también, en menor medida, por efecto cascada de la carnicería que montaron desde Buenos Aires.
Uñac necesita imperiosamente retener el voto del giojismo. Y Orrego también está urgido de amalgamar el voto larretista con el voto bullrichista, sin que se le escape ni uno solo por derecha hacia La Libertad Avanza.
Según De Tommaso, está cantado que el 22 de octubre habrá tres diputaciones nacionales repartidas, una para cada espacio político, como no sucede desde los años '90s en San Juan. De cumplirse este pronóstico, serían electos Jorge 'Koki' Chica, Nancy Picón y José Peluc. El orden sería indistinto, gracias al sistema D'hondt. Un voto más o un voto menos será irrelevante.
'En el caso de los senadores, uno de los tres no va a entrar', afirmó De Tommaso. Si se afianza la ola libertaria, Bruno Olivera podría ser arrastrado por el rugido del león. Y junto con él, su compañera de fórmula, María Atonela Coria.La tercera banca quedaría en disputa. Será para Uñac o será para Achem, dependiendo de quién tenga mayor arrastre.
La performance de Massa versus Bullrich en San Juan será crucial. Si el candidato de Unión por la Patria desplaza a la candidata de Juntos por el Cambio en la provincia, podrá festejar Uñac. Si sucediera a la inversa, la conquista será para Orrego.
Después habrá tiempo para evaluar el resultado nacional. Primero, salvar la patria chica.
JAQUE MATE