Uñac jinetea la catarata de anuncios de Massa
Aún denostada como el 'plan platita', la estrategia del ministro de Economía puede ser la mayor apuesta del gobernador en una elección que tendrá muy poco de provincial.
¿Y si la reconciliación empieza por la billetera? Aún denostada como el 'plan platita', la agresiva catarata de anuncios de Sergio Massa le devolvió la iniciativa política. Disputarle a Javier Milei la centralidad de la agenda mediática fue la apuesta y resultó. Para Sergio Uñac significa la última chance de salvar un año difícil, en una elección que tendrá muy poco de provincial.
Primero, una aclaración semántica: hablar de reconciliación implica aceptar que el gobierno se alejó de la gente. La inflación al galope desplazó al resto de los temas de la agenda y poco importó si algún número de la macroeconomía empezaba a dar buenas señales. La generación de puestos de trabajo registrado en el sector privado no compite con la caída del salario real. Peor aún ha sido la suerte de los que no tuvieron el paraguas de una paritaria. La mayoría.
Entonces sí, la seguidilla de anuncios de Massa tuvo como objetivo evidente hacer las paces con ese sector mayoritario, el de los trabajadores, que se sintió olvidado. Si las medidas llegaron a tiempo para salvarle la elección al Frente Unión por la Patria o no, eso recién se podrá evaluar el 22 de octubre.
Para Uñac ha sido una buena noticia la reacción de Massa. Todo el año el gobernador buscó escaparle al arrastre negativo del gobierno nacional, habiendo tomado nota del malestar social con Alberto Fernández. La demostración más evidente fue el adelantamiento del comicio provincial al 14 de mayo. Hay que retroceder hasta 1999 para encontrar otro antecedente similar en San Juan.
Este jueves en la entrega de viviendas en 25 de Mayo, Uñac defendió las medidas de Massa. En particular, las dos que podrían impactar en la coparticipación federal: la eliminación del impuesto a las Ganancias en los salarios y la devolución del IVA en productos de la canasta básica.
Una periodista le preguntó si considera que estos anuncios podían redituar electoralmente. 'Dios quiera que pueda incidir en positivo, yo creo que sí', contestó Uñac.
Destacó que los asalariados de mayores ingresos tendrán un aumento de bolsillo del 20 por ciento por dejar de pagar Ganancias. Y eso debería 'bajar la tensión', analizó el gobernador. Incluso apostó a que la gente pueda notar que el ministro de Economía está 'esforzándose al máximo' para tratar de dar soluciones en un contexto muy difícil.
Esta semana que termina, Uñac pudo exhibir un nuevo descenso del desempleo en San Juan, según datos oficiales del INDEC. Quedó rankeada como la quinta provincia con menor índice de desocupación a nivel nacional. Hubo nuevamente una fuerte difusión del número, con el acento puesto en el modelo sanjuanino de incentivo a la inversión privada. Sin embargo, el impacto de esta noticia en la campaña puede ser muy menor.
El nuevo gobierno provincial se resolvió el 2 de julio. El PJ fue desplazado por Marcelo Orrego y Juntos por el Cambio. Lo que está en juego ahora es lo nacional. Desde ese punto de vista, el justicialismo presentará los datos locales como un recorte del modelo que lidera Massa y que se plasmó en la provincia durante los últimos 20 años. El candidato a senador es Uñac, pero el voto difícilmente vaya a definirse con su foto.
Como en la primaria del 13 de agosto, el segmento de los senadores quedará en el medio de una boleta que empezará con la fórmula de presidente y vice. El arrastre positivo o negativo estará signado por esa primera sección. Uñac estará atado al éxito o al fracaso de la dupla Massa-Rossi en San Juan, dentro de 30 días.
La misma reflexión les cabrá a los candidatos de Orrego, Ignacio Achem para el Senado y Nancy Picón para Diputados. Si Patricia Bullrich no asciende fuertemente respecto de los puntos que obtuvo el 13 de agosto en esta provincia, será difícil para los orreguistas revertir la tendencia.
En la PASO hubo un fuerte corte de boleta y fue negativo para los candidatos sanjuaninos. En la primaria hubo 19.000 electores que pusieron su voto para presidente y vice, pero desecharon el resto de la lista. Ningún referente local sacó más puntos que su fórmula para la Casa Rosada. Esta observación acredita la altísima dependencia de Uñac y Orrego, de Massa y Bullrich respectivamente.
El caso más explícito ha sido el de los libertarios. La potencia de Javier Milei puso a sus candidatos a senadores y diputados nacionales a la par de las dos fuerzas tradicionales. Incluso los ubicó por encima. La ola libertaria rompió la polarización histórica.
Basta esta apretada lectura para entender que en estos últimos 30 días hasta el 22 de octubre habrá muy poco que discutir con respecto a lo provincial.
Por eso para Uñac fue una excelente noticia la reacción de Massa. Si el ministro de Economía recupera la centralidad en la agenda nacional, eso debería repercutir favorablemente en las chances del gobernador de ganar una banca en el Senado.
Para Orrego -urgido de contar con legisladores nacionales propios- es preocupante que Bullrich quede relegada en un contrapunto excluyente entre Milei y Massa. No está cerrado que las cosas vayan a terminar así. Pero la halcona enfrenta un desafío que nadie supo divisar hasta el 13 de agosto. Hasta entonces parecía cosa juzgada: quien ganara la interna de Juntos por el Cambio se encaminaba a ganar la Presidencia de la Nación. Error.
Uñac jinetea la catarata de anuncios de Massa con la expectativa de salvar un año difícil. La carrera por el Congreso terminará en apenas cuatro semanas. Este tramo final será al galope.
JAQUE MATE