El pasado 14 de septiembre se conocía la noticia de la muerte de Lara Agüero de 9 años por el feroz ataque de un perro de raza pitbull. El hecho ocurrió en el barrio Malimán de Rawson y causó conmoción en toda la provincia de San Juan.

A raíz de este fatídico episodio y otros antecedentes similares, la senadora sanjuanina, Cristina López elaboró un proyecto de ley sobre la tenencia responsable de perros potencialmente peligrosos. Esta normativa tiene como objetivo brindar mayor seguridad a las personas y otros animales.

Este proyecto considera perros potencialmente peligrosos a aquellos que, por su naturaleza agresiva, tamaño o potencia de mandíbula, tengan capacidad de causar la muerte o lesiones graves a las personas y a otros animales. Las características de estos animales son: más de 20 kilogramos de peso, perímetro torácico entre 60 y 80 centímetros, cabeza voluminosa y cuello corto, fuerte musculatura, mandíbula grande y boca profunda y resistencia y carácter marcado. Algunas de las razas consideradas peligrosas en este proyecto son el Pit Bull Terrier, Doberman, Dogo Argentino, Bull Terrier, Rottweiler, entre otros.

Alguna de las razas consideradas peligrosas por el proyecto

La idea busca reglamentar esta tenencia y otorgar obligaciones y deberes a los propietarios de estos animales. Entre otras medidas, se crearía un registro de propietarios de perros potencialmente peligrosos. Para ello deberán cumplir con una serie de requisitos tales como ser mayor de edad para ser propietario de estas razas de animales. También deberá brindar datos del can, tales como domicilio, certificado de sanidad del perro, entre otros.

En otro de sus artículos, el proyecto propone una serie de normas para prevenir posibles incidentes con el animal. Entre ellos se menciona la posible identificación del animal mediante un chip, uso de bozal en la vía pública, aplicación de carteles de advertencia en el domicilio del perro.

En caso de que el animal ataque o lesione a otro animal o a una persona, debe conducir el proceso de reeducación y adiestramiento. Todos estos incidentes deberán quedar asentados en un registro. Además, el propietario se convierte en el único responsable de las acciones civiles y/o penales producidas por la conducta del perro potencialmente peligroso.

El proyecto de ley también plantea sanciones para los propietarios que incumplan con estas exigencias. En ese caso, serán penados con sanciones o multas cuyo monto será dispuesto por la autoridad de aplicación competente en cada jurisdicción.

Las multas serán determinadas en función de las circunstancias de la infracción, el grado de reincidencia y de los antecedentes de mordedura y/o agresividad del animal.

Estas infracciones pueden llevar aparejadas otro tipo de consecuencias como la confiscación, decomiso y esterilización de los animales potencialmente peligrosos. También la suspensión temporal o definitiva de la licencia para tenencia de perros de este tipo.

Según el proyecto, las sanciones o multas impuestas a los propietarios de los perros, no los eximen de las posibles acciones en el fuero civil y/o penal.

Las disposiciones de este proyecto no incluye a los perros de las Fuerzas Armadas, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Cuerpos de Policía provinciales y Policía Federal. 

Sin embargo, quedarían incluidos en esta normativa todos los establecimientos o asociaciones que alberguen perros potencialmente peligrosos y se dediquen a su explotación, cría o comercialización. Para poder funcionar, deberán registrarse para su funcionamiento y obtener la autorización de la autoridad de aplicación, que será determinada por el Poder Ejecutivo Nacional.