La última denuncia por una presunta violación de una alumna de segundo año del Colegio Nuestra Señora de Luján destapó una serie de situaciones que se vienen repitiendo en el establecimiento en los últimos años de forma cíclica.

Los directivos no dan señales a los padres de accionar tomando el toro por las astas y esto es lo que motiva a pensar que los chicos están inseguros dentro del establecimiento. Ante el silencio de las autoridades sobre determinada situaciones los padres reaccionan. Si bien con los alumnos habría cierta comunicación sobre los casos, según dicen los directivos , los padres han manifestado que con ellos poco y nada se habla de esos temas desde la institución educativa y mucho menos notan que se tomen medidas. 

A esto hay que sumarle antecedentes que generan aún más incertidumbre en la comunidad educativa: cuando en su momento se radicaron determinadas denuncias por hechos graves en la escuela, era vicario de la institución el Sacerdote Walter Bustos, quien hoy está preso por al menos 3 casos de abuso contra menores denunciados oportunamente en la justicia. 

A esto hay que sumarle que el Colegio Luján estaba bajo la asesoría legal del cura Ricardo Doña, que en ésa época renunció y dejó los hábitos de la Iglesia Católica para seguir su vida.

Por si esto fuera poco al frente del cuerpo directivo administrativo estaría una mujer de apellido Mattar que tendría fuerte ligazón con funcionarios de la justicia sanjuanina, lo que muchos entienden podría haber influído para que las causas no avancen o tengan los resultados esperados.

Esta sucesión de hechos y más testimonios que se vieron en Canal 13 se suman a la caótica situación que se vive en el colegio privado, a tal punto que este lunes directamente se suspendieron las actividades por la escandalosa situación.