En un espacio de silencio y contención, el Ministerio de la Escucha se convirtió en un refugio emocional para los sanjuaninos. Este servicio, ubicado en la Iglesia Catedral, ofrece apoyo a personas de todas las edades y con distintas preocupaciones. Con la participación de laicos y religiosos, este refugio abre sus puertas de lunes a sábado, de 10 a 11:30 y de 18 a 19:30, y recibe a quienes necesiten ser escuchados, sin pedir nada a cambio.

El objetivo del Ministerio, que lleva más de un año activo, es brindar un espacio seguro para quienes enfrentan problemas en silencio. “Es un servicio gratuito, confidencial, y sin fines de lucro, que ofrece una oreja amiga para quienes así lo necesiten”, describió Marta Martínez una de las coordinadoras, en el móvil de Canal 13 San Juan. Entre los temas que la gente comparte, hay situaciones tan variadas como problemas laborales, matrimoniales, enfermedades, soledad, o la tristeza que deja un duelo.

El equipo de este ministerio aclara que no se trata de un espacio de confesión, una actividad exclusiva de los sacerdotes. “Simplemente escuchamos, la confesión es un sacramento que solo un sacerdote puede realizar. De hecho, cuando el sacerdote baja para confesar, cerramos el Ministerio de la Escucha para evitar confusiones”, aclaran, enfatizando que su tarea es prestar atención sin juzgar ni dar consejos.

Ministerio de la escucha un servicio de la iglesia Catedral que busca poner atención en las personas

Entre quienes se acercan a este espacio, hay adolescentes con inquietudes propias de su edad, como las relaciones familiares o las preocupaciones por su futuro. Las personas de mediana edad suelen buscar apoyo por problemas de pareja o laborales, mientras que los adultos mayores acuden a compartir su soledad, hablar sobre su salud o expresar preocupaciones que, muchas veces, no encuentran espacio en otros entornos.

Este ministerio representa una alternativa para aquellos sanjuaninos que desean hablar y liberar emociones en un entorno confiable. La confianza y la confidencialidad son los pilares de este servicio. Como detalló Marta: “A veces, la gente solo necesita alguien que escuche. Nos sentimos honrados de ser ese lugar al que pueden acudir”.