Este martes 4 de agosto se celebra el día Nacional del Obrero Panadero en Argentina, en conmemoración al 18 de julio de 1887, fecha en la que se fundó en Buenos Aires la Sociedad Cosmopolita de Resistencia y Colocación de Obreros Panaderos, el primer sindicato de esa profesión del país.

Sin dudad una profesión muy sacrificada, que demanda a los panaderos comenzar a trabajar desde muy temprano para que el pan del día esté listo en todas las casas. David, de 44 años, desde los 8, abraza esta profesión, “por curiosidad más que por necesidad”.

“Quise ver como se hacía y hasta la fecha todavía estoy dedicado a la harina”, comenzó diciendo el panadero sanjuanino. Además, el trabajador cuenta que más allá del diario sacrificio que su actividad laboral le demanda, no se siente cansado ya que hace lo que le gusta.

David a las 4:30 ya está arriba, dispuesto para comenzar la jornada laboral que comienza a las 6 de la mañana y termina a las 18. “Yo trabajo 12 horas y no me canso”, afirmó.

El maestro pastelero, comentó que a pesar de hacer pan en algunas oportunidades, su fuerte hoy en día son las panificaciones del tipo ”facturas”, de las cuales destacó que son hechas totalmente artesanalmente. “Acá no hay una máquina que te haga una tapita , que te hacen una forma o un dibujo, es todo artesanal, todo lo hacemos a mano, solo hay máquinas para hacer la masa”, aseguró.