'Mi mamá es discapacitada y no escucha, mi papá no puede caminar', comenzó relatando Laura, una vecina del Asentamiento La Florida en Pocito. Ambos jubilados se quedaron sin poder ir al baño tras el derrumbe de una de las paredes de su casa.

La pared del baño cayó la noche que el terremoto de 6.4 grados azotó la zona de Media Agua. Esa noche, ambos vieron caer la pared del sanitario, dejando inutilizable la habitación. 'No pueden entrar a bañarse, a hacer sus necesidades, y acá no viene nadie a ayudar', dijo a Canal 13.

Laura comentó que un dirigente de la zona se acercó hasta la vivienda pero que no ingresó. 'Solo vino a tomarnos los datos para un censo, pero nadie ha visto cómo quedó la casa', remarcó.

Ella es la única hija que queda cerca de la pareja de ancianos, que ahora deben realizar sus necesidades en situaciones de extrema incomodidad.